NOTA-CLAVE
"RECONOZCO MI OTRO Y AL MENGUAR ESE YO, CREZCO Y BRILLO".
A Géminis a veces se lo denomina "la constelación de la resolución de la dualidad en una síntesis fluída". Rigiendo, como lo hace, a todos los pares de opuestos en el zodíaco, preserva la interacción magnética entre ellos, manteniéndolos fluidos en sus relaciones, con el fin de facilitar eventualmente su transmutación en unidad, pues ambos finalmente deben llegar a ser Uno. Se ha de recordar que - desde el ángulo del desarrollo final de las doce potencias zodiacales - los doce opuestos deben transformarse en los seis fusionados, y esto se produce mediante la fusión de los pares de opuestos en la conciencia.
En el momento de cada Festival de la luna llena, la energía cualificada por la constelación influye en el flujo periódico dentro de la gama de la conciencia humana, estableciendo los atributos divinos en la conciencia de la humanidad. Esta afluencia espiritual puede ser canalizada mediante la meditación en las mentes y los corazones de todas las personas. La técnica de la meditación rige todas las expansiones de conciencia, todo registro del Plan o Propósito y todo el proceso de desarrollo evolutivo.