“El desafío característico del siglo XXI será enfrentarnos a la realidad de que la humanidad comparte un destino común sobre un planeta lleno de gente.” Esta afirmación la hace Jeffrey Sachs en su libro Common Wealth (Penguin, 2008). Todos estamos implicados y también debemos implicarnos también en la resolución de los numerosos desafíos que confrontan a la humanidad en estos tiempos. Sin embargo, estos desafíos se perciben a menudo como abrumadores e insolubles, y muchas personas se dejan caer en una actitud negativa de “no hay nada que hacer” que impide una acción correcta.
Por lo tanto, es sumamente refrescante y muy alentador leer este libro de Jeffrey Sachs. Va más allá de la simple descripción de los principales problemas del mundo a los que todos nos enfrentamos: les proporciona repuestas prácticas y realistas. Éstas son el resultado de análisis estadísticos, demográficos, de un escrutinio científico, y de proyectos piloto prácticos. Desde el cambio climático, pasando por la escasez de agua potable, a tratar con el azote de la malaria, por ejemplo, revela caminos adelante que no sólo son realizables, sino fácilmente asequibles. De hecho, comenta a menudo que no resolverlos resultará, a la larga, en una actividad mucho más cara e inevitable.
Un tema central del libro es la idea de que nosotros, la humanidad, tenemos elección. Hay muchas decisiones prácticas y acciones que necesitamos emprender como individuos y comunidades, como naciones e internacionalmente. Colectivamente, estas pueden colocar a la humanidad y al mundo en un camino distinto y mucho mejor.
En el capítulo final, llamado acertadamente “El poder del uno”, recomienda ocho acciones que cada uno de nosotros puede emprender “para lograr las esperanzas de una generación de construir un mundo de paz y desarrollo sostenible”. Aprender sobre los desafíos a los que todos nos enfrentamos, viajar y ser parte de la humanidad, unirnos a una organización comprometida con el desarrollo sostenible, fomentar la implicación de la comunidad e inspirar a otros, promover el desarrollo sostenible a través de las páginas de redes sociales, comprometerse políticamente, implicar a su lugar de trabajo, vivir personalmente de acuerdo con los estándares de las promesas y objetivos del milenio de la ONU.
Este libro es una magnífica llamada a despertar que nos recuerda que no tenemos por qué ser víctimas: podemos co-crear nuestro futuro común. Como afirma Jeffrey Sachs: “Nuestra generación es la que puede acabar con la pobreza extrema, cambiar el rumbo respecto al cambio climático, y terminar con la extinción masiva e irreflexiva de otras especies. Nuestra generación es la que puede enfrentarse y resolver el rompecabezas de combinar el bienestar económico con la sostenibilidad medioambiental. Nuestra generación es la que puede combinar la ciencia con una nueva ética de cooperación global para legar un planeta sano a las generaciones del mañana.”
