La Fuerza de Shamballa

Shamballa

el centro donde la Voluntad de Dios  es conocida

Shamballa

Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida
Que el propósito guíe a las pequeñas voluntades de los hombres,
El propósito que los Maestros conocen y sirven.

La Gran Invocación es bien conocida en todo el mundo y se predijo que se convertiría en una plegaria mundial para la nueva era.

La realidad de los grandes centros de energía del planeta también se está estableciendo como una posibilidad razonable y práctica. La Jerarquía espiritual del planeta, el “punto de Amor en el corazón de Dios”, ya está siendo aceptada por muchas personas. Puede transformarse en una viva realidad para un creciente número de hombres y mujeres dedicados que aman y sirven a la humanidad.

Nos hallamos ahora ante la posibilidad de aproximarnos al “centro donde la Voluntad de Dios es conocida”, Shamballa. Shamballa es el centro coronario planetario, así como la Jerarquía es el centro cardíaco. Es el foco del propósito y la voluntad de Dios, así como la Jerarquía lo es para el amor y sabiduría de la Deidad.

Solamente podremos emplear con sabiduría el poder inherente a la voluntad espiritual cuando hayamos aprendido a amar sin egoísmo y a desarrollar la comprensión y la compasión por todos los seres humanos. El poder de amar y vivir de acuerdo con los valores y principios espirituales expande la conciencia, evoca al alma y allana el camino hacia la comprensión de la voluntad y el propósito divinos.

Pensamientos Clave

Shamballa es simplemente una palabra que da la idea de un vasto punto focal de energías acopiadas y reunidas por el Logos planetario con el fin de crear una manifestación adecuada a Su intención en desarrollo y al servicio planetario.

Shamballa es un estado de consciencia o una sensible fase de percepción donde existe una aguda y dinámica respuesta al propósito divino.

Shamballa es el lugar donde se halla el propósito. Es un propósito que no puede ser comprendido a menos que se conozca el Plan.

Shamballa no es un Camino, sino un centro mayor de estados relacionados y una energía relativamente estática, energía que la intención enfocada del Gran Concilio, actuando bajo el ojo directriz del Señor del Mundo, mantiene preparada para propósitos creadores.

Shamballa es el punto de mayor tensión en el planeta, tensión que expresa voluntad amorosa inteligente, libre de toda voluntad personal o prejuicios mentales.

Shamballa es el principal agente receptor del planeta, desde el ángulo de la afluencia solar, pero al mismo tiempo es el principal punto distribuidor de energía desde el ángulo de los reinos de la naturaleza, incluyendo al quinto. Desde el punto de tensión el patrón de la vida del Logos planetario y Su voluntad toman forma y finalmente maduran a través del proceso de evolución.

Shamballa es el centro coronario – simbólicamente hablando – de nuestra Vida planetaria, enfocando su voluntad, su amor y su inteligencia en una gran y fundamental Intención y manteniendo ese punto enfocado durante todo el ciclo de vida del planeta. Esta gran Intención personifica el propósito y se expresa por medio del Plan.

“el centro donde la Voluntad de Dios es conocida”.

La Paz, como expresión de la voluntad de Shamballa, produce equilibrio, síntesis y comprensión, más un espíritu de invocación. Esto se manifiesta como el primer gran trabajo creador y mágico de que es capaz la humanidad, llevando los tres aspectos divinos a una actividad simultánea de acuerdo con la Voluntad de Dios.

La Fuerza de Shamballa

La fuerza de Shamballa, el fuego de la voluntad al bien, está disponible para ser empleada correctamente, pero el poder de expresarla reside en su comprensión y uso grupales.

Esta fuerza ejerció su primer impacto directo sobre la humanidad en el siglo XX. En etapas anteriores había influido sobre la humanidad, pero sólo luego de ser aminorada y modificada por el gran centro planetario de la Jerarquía. Tanto en el año 1975 como en el año 2000 hubo un impacto directo. Cada vez que esta energía incide sobre la conciencia humana, se manifiesta con mayor plenitud algún aspecto del Plan divino. Esta es la energía que produce la síntesis, la que mantiene unidas a todas las cosas dentro del círculo del amor divino. A partir de estos impactos el pensamiento humano ha incrementado, como nunca antes, su interés en el establecimiento de la unidad y en el logro de la síntesis en todas las relaciones humanas; un resultado de dicha energía ha sido la creación de las Naciones Unidas.

La energía de Shamballa guarda relación con la vivencia de la humanidad (a través de la consciencia y la forma). Atañe al establecimiento de rectas relaciones humanas, y es esta influencia la que abre las mentes humanas a la realidad del Plan de amor y de luz.

El aspecto voluntad solamente puede ser contactado desde el plano mental y por ende solo quienes trabajan con y a través de la mente pueden comenzar a apropiarse de esta energía. Quienes responden a la fuerza de Shamballa se acercan plenamente a la energía del fuego. El fuego es el símbolo y la cualidad del plano mental; es un aspecto de la naturaleza divina.

Hay tres grandes energías enfocadas en Shamballa, el sitial del fuego:

1. La Energía Purificadora: este es el poder, innato en el universo manifestado, que gradual y paulatinamente adapta el aspecto sustancia a lo espiritual. Ello implica la eliminación de todo lo que obstaculice la plena expresión de la naturaleza de la divinidad.

2. La Energía Destructora: esta es una destrucción que elimina o cambia las formas que aprisionan la vida espiritual interna y ocultan la luz interior del alma.

3. La Energía Organizadora: esta es la energía que dio origen al impulso que produjo la manifestación. La relación entre espíritu y materia, cíclicamente y bajo la ley, crea el mundo manifestado como campo para el desarrollo del alma y como un área en donde se realiza el propósito divino por medio del Plan.

La fuerza de Shamballa, por lo tanto, es el foco para la voluntad al bien, la cual conduce a las rectas relaciones humanas y al establecimiento de la paz sobre la Tierra.

Cooperación con la Voluntad al Bien

El potente primer rayo de voluntad o propósito está despertando hoy a la actividad, con su creciente efecto sobre las mentes y las “pequeñas voluntades” de los seres humanos. La respuesta es compatible con la cualidad de estas mentes y con la intención de la voluntad humana.

Como demostración de la benéfica voluntad de Dios, esta poderosa energía tiende a destruir todas las formas que impidan el surgimiento de un mundo nuevo y mejor; actúa como una fuerza sintetizadora que produce la unión de todas las unidades separadas de vida y conciencia. Ejerce un profundo efecto sobre el campo de la política y sobre la conciencia de quienes se ocupan de todos los aspectos del gobierno en cada nación del mundo.

La energía de Shamballa es una demostración de la voluntad de Dios en una poderosa vivencia. La voluntad al bien anima a todo el proceso evolutivo, un proceso en el que la humanidad puede hoy participar inteligentemente. La meditación grupal hace posible una cooperación activa y efectiva. El tema de la voluntad al bien, la revelación de la voluntad divina, y la receptividad y distribución grupales de la fuerza de Shamballa –como una energía estabilizadora y sintetizadora en el mundo de los asuntos humanos– pueden crear un punto focal de meditación poderosamente evocador.

La Jerarquía espiritual del planeta está interesada en el inminente impacto de la fuerza de Shamballa sobre la conciencia humana. Ahora, un gran número de hombres y mujeres en formación grupal pueden cooperar conscientemente con la Jerarquía en este acontecimiento planetario, mediante la meditación y el empleo regular y decidido de la Gran Invocación.

La Gran Invocación

Desde el punto de Luz en la Mente de Dios
Que afluya luz a las mentes de los hombres.
Que la Luz descienda a la Tierra.

Desde el punto de Amor en el Corazón de Dios
Que afluya amor a los corazones de los hombres.
Que Cristo retorne a la Tierra.

Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida
Que el propósito guíe a las pequeñas voluntades de los hombres,
El propósito que los Maestros conocen y sirven.

Desde el centro que llamamos la raza de los hombres
Que se realice el Plan de Amor y de Luz
Y selle la puerta donde se halla el mal.

Que la Luz, el Amor y el Poder restablezcan el Plan en la Tierra.