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EL NUEVO GRUPO DE SERVIDORES DEL MUNDO - Parte 2

Ante todo, un período preliminar en que surgirá la consciencia pública y hará así sentir su presencia. Esto se efectuará mediante la constante comunicación de los nuevos ideales y el continuo énfasis puesto sobre la unicidad esencial de toda la humanidad, [i425] resultado de la uniformidad y la inclusividad de la nota emitida en todas partes. Durante esta etapa, no debe haber trabajo apresurado ni acción precipitada de ninguna especie. El crecimiento del grupo y de sus ideas será lento y seguro. El grupo ya existe. No debe ser formado ni organizado, por lo tanto, ninguno de ustedes debe asumir responsabilidades ni organizar actividad alguna designada para atraer y dar publicidad a los discípulos que han elegido trabajar subjetivamente. Estos no son los métodos que los Hermanos Mayores de la raza aprueban ni la forma en que ellos trabajan.

Cada uno de ustedes debe saber si aprueba la nueva posición, la nueva actitud hacia el trabajo y el método subjetivo. Decídanse, de una vez por todas, si prefieren trabajar en la antigua forma exotérica y ambiciosa, construyendo y vitalizando una organización, y así producir el mecanismo que acompaña a este método de trabajo. Recuerden que estos grupos aún son muy necesarios y útiles. Todavía no estamos en la nueva era y los pequeños no deben quedar expuestos a las nuevas fuerzas ni alejados y privados de la guardería a la que lógicamente pertenecen.

Si este nuevo método de trabajo les atrae, procuren subordinar la personalidad, dar suprema importancia a la vida de meditación, cultivar la sensibilidad hacia el reino subjetivo y manejar de adentro afuera cualquier actividad externa necesaria. Eviten la introspección puramente mística o su extremo opuesto, el espíritu de exagerada organización, recordando que una vida de verdadera meditación ocultista debe producir inevitablemente acontecimientos externos, pero que estos resultados objetivos sean ocasionados por el crecimiento interno y no por la actividad externa. Una antigua Escritura enseña esta verdad en los términos siguientes:

[i426] “Cuando el sol progresa en la mansión del ser que sirve, el camino de la vida toma el lugar del camino del trabajo. Entonces, el árbol de la vida crece hasta que sus ramas cobijan a todos los hijos de los humanos. La construcción del Templo y el acarreo de las piedras cesa. Se ven crecer los árboles que crecen; los edificios desaparecen. Que el sol pase a su lugar señalado y, en este día y generación, cuiden de las raíces del crecimiento”.

Pequeños grupos surgirán en todas partes, cuyos miembros responden a la nueva nota y cuyo progreso hacia un grupo mundial será vigilado por uno o más discípulos activos. Pero estos no organizarán más tarde los grupos; ellos se desarrollarán cuando los seres humanos de todas partes despierten a la nueva visión o vengan a la encarnación para ocupar su lugar en el trabajo y traer la nueva era. Estos grupos no demostrarán ningún sentido de separatividad, ni tendrán ambición personal o grupal; reconocerán su unidad con todo lo que existe y permanecerán ante el mundo como un ejemplo de vida pura, creadora y constructiva, de actividad creadora subordinada al propósito general, de belleza e inclusividad. Tal vez, en las primeras etapas de integración, la palabra amistad y colaboración describan mejor a dichos grupos, pues no son dogmáticos ni doctrinarios, ni utilizan consignas secretas. Su característica sobresaliente consistirá en estar libres del espíritu de crítica, tanto individual como grupalmente. La abstención de criticar no provendrá de la incapacidad de ver el error, o de no saber valorar una idea; serán reconocidas la falsedad, la impureza y la flaqueza, pero al ser estudiadas servirán para evocar una ayuda efectiva.

Estos grupos llegarán paulatinamente a conocerse entre sí y a encontrarse en lugares y horas determinados. Concurrirán a conferencias sin ningún deseo de impresionar ni de hacer alardes de poderío numérico; tampoco demostrarán ambición alguna de acrecentar sus filas para hacer proselitismo. ¿No podrían actuar así, [i427] al reconocerse como miembros de un mismo grupo mundial? No tienen que impartir enseñanza de naturaleza doctrinaria ni aparentarán ser eruditos. Se reunirán con el único objeto de discutir la forma de ayudar al mundo y desarrollar un programa universal, cuyas verdades fundamentales puedan ser presentadas bajo diferentes métodos y utilizando las numerosas terminologías. Se esforzarán por emplear y familiarizarse con todos los términos y el modo en que cada uno se acerca a la realidad y a los símbolos.

Gradualmente será reconocida la nota y la contribución particular de cada grupo, y donde existe la necesidad de ese acercamiento especial y la determinada nota o el método de interpretación, en cualquier parte del mundo, habrá un impulso inmediato y unido que facilitará el trabajo que podrá desempeñar, en tal lugar, ese grupo especializado.

Estos grupos, con el grupo subjetivo de almas vivientes y conscientes detrás de ellos, estarán muy ocupados en el servicio e intereses mundiales. No perderán el tiempo en cosas frívolas, no esenciales, ni se ocuparán de los nombres, insignias y emblemas grupales, ni de los tecnicismos de las fraternidades cuando se encuentren. Las necesidades y oportunidades mundiales, el rápido desarrollo de la consciencia del género humano y la iniciación humana en las realidades espirituales absorberán tanto su atención, que no se interesarán puramente por los arreglos del plano físico ni pondrán énfasis sobre su propio desarrollo personal. Serán bien conscientes de que la respuesta a la necesidad mundial, mediante el servicio y una vida de meditación enfocada, fomentará su crecimiento. No tendrán sus ojos puestos en sí mismos ni sobre su buen comportamiento o realizaciones individuales.

Más adelante, como resultado de su relación telepática y de sus conferencias conjuntas, surgirán ciertos grupos y escuelas esotéricas de desarrollo, con el fin de equiparlos más rápidamente para el servicio mundial. En estas escuelas [i428] se enseñarán los métodos de meditación, la intensificación de la vibración, las leyes del universo y el correcto empleo del color y del sonido. Pero todo estará subordinado a la idea del servicio y a la elevación de la humanidad. También las escuelas mencionadas en el libro Cartas sobre Meditación Ocultista vendrán gradualmente a la existencia.

Pero, ¿de qué sirve pronosticar el futuro en términos más explícitos y presentar un cuadro atractivo, cuando en el presente la integración del grupo de místicos mundiales y su estrecha unificación aún no es un hecho consumado?

La unidad del mundo, la hermandad en su verdadero sentido, el acrecentamiento del intercambio telepático, la eliminación de lo no esencial que separa los pensamientos de los seres humanos y produce separatividad en el plano físico, y el verdadero énfasis puesto sobre los fundamentos de la Sabiduría Eterna, la manifestación de una verdadera comprensión, la realización de la unificación con el alma, y el reconocimiento de aquellos que pertenecen al grupo de los Salvadores del mundo, es el trabajo inmediato que debe realizarse y absorber toda su atención.

Esto, y solo esto, justifica la entrega de todo lo que alguno de ustedes puede dar -amor y vida, tiempo y dinero.

Esto y solo esto, justifica la existencia de cada uno, y evoca, en todos aquellos que responden a la visión, ese autosacrificio absoluto que es tan raro encontrar y de efectos tan trascendentes. Ofrendar todo lo que uno posee a los pies del Señor de la Vida para poder avanzar en el trabajo de salvación mundial, eliminar de la vida todos los obstáculos, dar todo lo que uno tiene, hasta el dolor de dar, reglamentar la propia vida sobre la base del renunciamiento, interrogándose a cada instante, ¿qué renuncias debo hacer para poder ayudar más eficazmente? Eso y más que eso, está por delante de todos los que escuchen el llamado y responden a la necesidad y a la oportunidad.

[i429]  Permítanme decirles, este grupo que ahora está en proceso de formación con el tiempo desarrollará su propio “yoga” y su escuela de entrenamiento que gradualmente reemplazará a las escuelas de raja y bhakti yoga. El método de entrenamiento solo se dará a quienes han entrenado la mente y aprendieron a controlar las emociones. Esta es la clave de lo que está ahora sucediendo. El método de entrenamiento no será un atajo fácil para llegar a la meta. Solo los inteligentes pueden obtenerlo y solo las personalidades coordinadas serán elegidas para la enseñanza. La nota clave del nuevo yoga será la síntesis; su objetivo será el desarrollo consciente de la intuición. Este desarrollo consistirá primeramente en el desarrollo de la intuición y la verdadera percepción espiritual y, luego, en la aplicación del entrenamiento de la mente como agente interpretativo.

En el libro Agni Yoga, parte de la enseñanza dada ha sido depurada, pero únicamente desde el ángulo del aspecto voluntad. No ha aparecido aún el libro que dé en alguna forma el “yoga de la síntesis”. Tenemos libros sobre “bhakti yoga” o la unión por medio de la devoción. En la actualidad el énfasis se pone en el Raja Yoga o la unión por medio de la mente. Suena a redundancia hablar de la unión mediante la síntesis, pero no es así. Es la unión a través de la identificación con el todo -no la unión por medio de la realización o la visión-. Observen bien esta diferencia, porque contiene el secreto del próximo paso que deben dar las personalidades de la raza. El Bhagavad Gita nos proporciona principalmente la clave del yoga de devoción. Patanjali nos enseña el yoga de la mente. En la historia de los Evangelios tenemos la descripción de la realización, pero el secreto o la clave de la identificación nos está todavía vedado, está bajo la custodia de unos pocos, en este integrado grupo de místicos y de conocedores, y vendrá a la manifestación en la fragua de su experiencia individual y dada así al mundo. Aún no ha llegado la hora. El grupo debe acrecentar su fuerza, su conocimiento y su percepción intuitiva.

[i430]  Quizás me pregunten, ¿qué impide a una persona ser miembro de tal grupo? Digo con énfasis que solo cuatro cosas impiden su afiliación:

Primero, una personalidad no coordinada. Esto implica necesariamente una mente sin entrenamiento y un intelecto débil.

Segundo, el sentido de separatividad, de diferenciación y de superioridad, respecto a sus semejantes.

Tercero, la posesión de un credo. No importa cuán bueno sea, inevitablemente produce exclusividad. Siempre excluye a alguien.

Cuarto, el orgullo y la ambición.

También preguntarán: ¿cómo cualificarse uno mismo? Las reglas son tres y sencillas. Primero, aprendan a practicar la inofensividad; segundo, no deseen nada para el yo separado, y, tercero, busquen el signo de la divinidad en todo. Tres reglas sencillas, pero muy difíciles de realizar.

Detrás de este grupo de místicos, que incluye a los pensadores (repito la palabra pensadores) de todos los sectores del pensamiento y del conocimiento humanos, se encuentra la Jerarquía de Maestros, y entre estos dos grupos también existe un conjunto de instructores, del cual formo parte. Ellos actúan como intermediarios y transmisores de energía. Repito y pido nuevamente que presten atención, pues este grupo que se va formando lentamente es extraído de todos los grupos imaginables de pensadores y seres inteligentes. Sin embargo, y esto sorprenderá a algunos, no hay entre ellos muchos de los así llamados ocultistas. Esto se debe a que los ocultistas son numéricamente pocos en relación con las masas, y también a su tendencia al sectarismo, exclusividad y autoestimación. Los trabajadores humanitarios y altruistas se encuentran entre ellos; los dirigentes políticos, los economistas y los científicos de los laboratorios del mundo también están allí, y los eclesiásticos y adherentes de todas las [i431] religiones del mundo, como también los místicos prácticos y unos cuantos ocultistas. El verdadero ocultista es raro de encontrar.

El grupo es y será totalmente subjetivo. Sus componentes están vinculados telepáticamente, o se reconocen entre sí a través de la calidad del trabajo que están haciendo en el mundo externo y la inclusividad de la nota que emiten. Está inspirado desde arriba por las almas de sus integrantes y por los Grandes Seres, y su actividad energetizada, debido a las necesidades de la humanidad misma. Está compuesto de almas vivientes y conscientes que actúan a través de personalidades coordinadas. Su símbolo es un triángulo dorado que encierra una cruz de brazos uniformes, con un brillante en un ápice del triángulo. Este símbolo nunca se reproduce en forma alguna. Brilla sobre las cabezas de todos los que pertenecen al grupo, y nadie puede verlo (ni siquiera un clarividente), a excepción de alguno de sus miembros, y solo cuando -para propósitos del trabajo- es necesario estimular su reconocimiento. El lema del grupo es: La Gloria del Uno.

Nada más puedo decir por ahora, pero dará una idea de la realidad del trabajo que se lleva a cabo. Quizás sirva de incentivo para un renovado esfuerzo, por parte de todos los que trabajan y se capacitan en el servicio altruista.

Haremos ahora una breve consideración sobre los tipos de energía de cualidad superior, que se hallan mezclados y compuestos por energías coordinadoras. La materia temática es, por lo tanto, de naturaleza tan avanzada, que es inútil que el aspirante dedique mucho tiempo a su estudio. Se requerirían asimismo volúmenes, si todo lo que podría decirse se escribiera, y en este libro solo es posible dar algunas amplias generalizaciones e indicar ciertos hechos interesantes. La razón principal por la cual no nos resultaría provechoso estudiar estas energías demasiado detenidamente, se debe a que el Espíritu o Logos planetario, y la Entidad planetaria, son dos formas en manifestación activa que responden con mayor fuerza al impacto de estas energías. El ser humano responde, y lo hace [i432]  inconscientemente, porque (su naturaleza forma) constituye parte de la expresión planetaria.

El Espíritu planetario es un Ser que hace muchísimo tiempo pasó por el estado de consciencia que llamamos humano, y lo ha dejado muy atrás. Su origen (usando el pronombre personal sencillamente por razón de claridad terminológica) se halla totalmente fuera del sistema solar; su vida está enfocada en el planeta; su consciencia se encuentra en esferas mucho más alejadas del concepto del adepto más elevado de nuestra Jerarquía planetaria. La Entidad planetaria es la suma total de las formas que constituye mediante la cual se está manifestando el Espíritu planetario y, por lo tanto, es la síntesis de los elementales planetarios físico, astral y mental. Para nuestro propósito, esta Entidad es la totalidad de todas las formas, físicas, vitales, astrales y mentales que, fusionadas y mezcladas, constituyen nuestro planeta. Cada una constituye la encarnación de una energía, y estas dos corrientes mayores, que producen los aspectos forma y consciencia de nuestra existencia planetaria, hacen su impacto sobre el ser humano. La vida del Espíritu planetario hace su impacto vía el alma, y la vida de la Entidad planetaria es registrada mediante el mecanismo de la personalidad.

La cualidad de dichas energías es esencialmente astral-búdica; la predisposición de las fuerzas vitales y la dirección general de los impulsos que influyen sobre la humanidad, en este gran ciclo, son la energía atractiva de la naturaleza intuitiva del Logos planetario y la potente fuerza del cuerpo astral o de deseo. En otras palabras, el elemental astral que encarna la naturaleza de deseo del Logos planetario, es extremadamente poderoso, particularmente en este ciclo actual, pero la fuerza de la naturaleza espiritual e intuitiva de Aquel en quien vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser, está acrecentándose constantemente. Por otra parte, tenemos la devastadora expresión en la búsqueda de los placeres, del sexo y del crimen, resultados de la satisfacción del deseo. [i433] Esto caracteriza nuestra civilización y está ahora en todo su apogeo; podría decirse que está casi declinando, aunque no se sienta. Al mismo tiempo, la puerta de la iniciación está abierta. Ambas oportunidades (si puedo llamarlas así) están presentes simultáneamente, pero la fuerza de una se está debilitando, y la tendencia de la otra acrecentando. Así podrá vislumbrarse la solución y verse el camino de salida.

En el párrafo anterior están resumidos los presentes impulsos planetarios dominantes y se observa la reacción de las personas hacia estos.Las energías solares también tienen un efecto doble. Primero, existe lo que podríamos llamar efecto pránico, resultado del impacto de la fuerza solar que emana del sol físico. Esto produce resultados definidos sobre las formas objetivas, y estas se denominan físicas o vitales. Penetran en el cuerpo humano a través del bazo y también por un centro situado entre los omóplatos, entre los centros laríngeo y cardíaco en la columna vertebral, pero más cerca del corazón que de la garganta. Segundo, hay energías que emanan de lo que se llama esotéricamente “el corazón del sol”, que fluyen a través de uno de los planetas, en siete grandes corrientes, penetran en el alma del ser humano y producen esa sensibilidad que llamamos percepción. Estos siete tipos de energía producen siete tipos de almas o rayos, y en este pensamiento hallarán el secreto de la unidad del alma. Durante la manifestación, debido a los siete tipos de impactos de energía que actúan sobre la materia del espacio, se encuentran siete tipos de almas, siete campos de expresión y siete grados de consciencia y de características de rayo. Estas diferenciaciones, como bien saben, son iguales al colorido que el prisma toma cuando está expuesto a los rayos del sol, o a los arabescos reflejos de un lago cristalino.