Navegar por los Capítulos de este Libro

2. El Reino Vegetal

 

Las influencias ....................... Del segundo Rayo de Amor-Sabiduría se expresan como sensibilidad vastamente acrecentada.

Del cuarto Rayo de Armonía y Belleza se expresan como armonización general de este reino en todo el planeta.

Del sexto Rayo de Devoción o (como se ha expresado simbólicamente en La Sabiduría Antigua) “el anhelo de consagrar la vida al Sol, el dador de esa vida” o también, “el anhelo de dirigir el ojo del corazón al corazón del sol”.
   
Los resultados ....................... Se expresan en el segundo reino como magnetismo, perfume, color y crecimiento hacia la luz. Les recomiendo que estudien estas palabras cuidadosamente, porque en este reino es donde se observa por primera vez con toda claridad la gloria futura de la humanidad:

a. La radiación magnética. La fusión de los objetivos de los reinos mineral y vegetal.
b. El perfume de la perfección.
c. La gloria del aura humana. El radiante Augoeides.
d. La aspiración que conduce a la inspiración final. [i234]
   
El proceso ............................. La conformidad, o el poder de estar de acuerdo con los cánones impuestos en el cielo y producir abajo lo que existe arriba. En este reino esto se realiza con más facilidad que en el reino mineral, donde el proceso de condensación se efectúa ciegamente.
   
El secreto .............................. La transformación. Procesos ocultos de la alquimia que permiten a los vegetales de este reino extraer el sustento del Sol y del suelo y transformarlo en forma y color.
   
El propósito .......................... El magnetismo. Fuente interna de belleza, encanto y poder atrayente que atrae hacia sí formas de vida más elevadas, y hace que los animales lo consuman como alimento y las entidades pensantes extraigan inspiración, estímulo y satisfacción mental.
   
Las divisiones ....................... Los árboles y arbustos.
Las plantas florales.
Las hierbas que no entran en las dos especies anteriores. El grupo de vegetales que se clasifican en forma general como flora marina.
   
El agente objetivo .................. El agua.
   
El agente subjetivo ................ El tacto.
   
La cualidad ............................. Rajas o actividad.


No intento exponer en este tratado lo que el lector puede hallar en los libros de texto académicos escolares, ni es mi trabajo dar la información paralela que se halla en la enseñanza esotérica y en la teología de la ciencia moderna. Trato de demostrar la síntesis que reside en todo y señalar la continuidad de conciencia que puede ser observada por el esotérico. Así se verá la parte integrada en la [i235] totalidad, distintamente de la observada cuando se considera la forma. El interés primordial reside en el mundo de las causas, aunque se consideren y estudien los que se clasifican como resultados, pues a medida que se demuestren como causas iniciales se llegará a comprender mejor su significación. Cuando se capte el poder radiactivo del reino mineral se comenzará a investigar el fundamento de la escala evolutiva y a comprender los primeros pasos dados por la vida de Dios, por intermedio de las formas manifestadas. Si al terminar este tema el estudiante puede captar algo del significado de las palabras simbólicas -Radiación, Magnetismo, Experimento, Transmutación y Realización- y se da cuenta que personifican el propósito y la meta de cada uno de los cinco reinos de la naturaleza, en los cuales estamos fundamentalmente interesados, observará entonces la emergente realidad de la conciencia y captará la prevaleciente síntesis.

A. Vida - radiación - magnetismo

En los Aforismos de Patanjali se dice que “dominando la vida que nos atrae, se obtiene la radiación”, y en estas palabras reside la clave de la relación que existe entre el reino mineral y el reino humano. En otras palabras, “mediante el consciente control de la naturaleza mineral estática, tal como se expresa en el ser humano, produce finalmente la actividad radiante”. Así la “chispa se convierte en llama”. (Patanjali: III, 40, La Luz del Alma). A través de los Aforismos de Patanjali, se podrán hacer comparaciones efectivas, especialmente al considerar los diversos quíntuplos que con tanta frecuencia se hallan en la manifestación. Dicho libro es un tratado básico para el entrenamiento iniciático. Tomemos como ilustración las palabras del Libro III, 44, y observemos la luz arrojada sobre el ciclo evolutivo y el desarrollo simbólico de los cinco reinos de la naturaleza: [i236]

“La meditación concentrada en las cinco formas que adopta cada elemento, otorga el dominio sobre todos los elementos. Estas cinco formas son la naturaleza densa, la forma elemental, la cualidad, la penetrabilidad y el propósito básico.”

Por lo tanto podrían considerarse las siguientes analogías:

1.La naturaleza densa El reino mineral.
   
2. La forma elemental El reino vegetal.
   
3. La cualidad El reino animal.
   
4. La compenetración El reino humano.
   
5. El propósito fundamental El reino de las almas.


Obsérvese también la correlación de ideas que puede hallarse a medida que se estudian las palabras siguientes:

“La meditación concentrada en la relación existente entre el cuerpo y el akasha otorga la ascensión fuera de la materia (los tres mundos), y el poder de viajar en el espacio”. (Patanjali III, 42. La Luz del Alma).

Se evidencia aquí cuán valiosa es la enseñanza de este aforismo, si se retiene en la mente el aspecto conciencia, y cómo se aclaran las relaciones en una escala más amplia que la humana:

1. El cuerpo Reino mineral La densa prisión de la vida.
     
2. El akasha Reino vegetal La vida consciente fluida.
     
3. La ascensión
    fuera de la materia
Reino animal La meta evolutiva de la relación que existe entre el cuerpo y el akasha.
     
4. El poder de viajar en
    el espacio
Reino humano La meta de la conciencia humana mediante la comprensión de los tres mencionados.


En este tratado me ocupo de las relaciones e influencias internas [i237] de rayo que producen los resultados externos deseados. También quiero aclarar la meta de la conciencia evolutiva. La ciencia puede manejar con habilidad y discernimiento la evolución de las formas. Trataré de preparar el terreno para la futura ciencia (de la cual la psicología moderna es el comienzo experimental) que se ocupará de la evolución de la conciencia con la misma facilidad que la ciencia moderna trata de cómo las formas son expresiones de la vida. Sólo cuando esa nueva ciencia haya alcanzado el grado de desarrollo que tiene ahora la ciencia materialista, se podrá considerar la evolución de la vida a través de la conciencia en la forma. He hecho aquí una manifestación fundamental y sintética que requiere comprensión. Mis razonamientos pueden ser seguidos con cierta facilidad por aquellos cuya conciencia se expande de lo humano a lo egoico.

Una pregunta muy oportuna podría formularse aquí: ¿Qué es lo que determina el rayo que debe regir o influenciar predominantemente a cualquiera o todos los reinos de la naturaleza? Debe recordarse que cualquier reino, viéndolo como un todo, es una entidad, y (en su aspecto forma) la totalidad de las formas constituyen el cuerpo de manifestación de esa entidad. En último análisis, también el conjunto de influencias auto-iniciadas y la radiación magnética de ese reino expresan la cualidad o cualidades fundamentales de esa entidad -el aura de su personalidad-. Dos rayos rigen cada reino de la naturaleza, excepto el reino Vegetal, donde tres rayos indican el tipo de vida que existe en ese reino. Será de utilidad para los estudiantes considerar este problema desde el punto de vista de la analogía y comprender que ellos (lo mismo que los demás seres humanos) se rigen o actúan mediante dos rayos, por ejemplo el rayo de la personalidad y el egoico. Después de la tercera iniciación el discípulo tiene tres rayos activos, porque el rayo de la Mónada comienza a hacer sentir su presencia. Una situación análoga existe en todos los reinos de la naturaleza. Dos rayos [i238] predominan en cada reino, pero el reino vegetal es controlado por tres rayos, porque está más evolucionado (en sus propias y peculiares líneas) que cualquier otro, debido a que en él actúa lo que podría considerarse el rayo monádico de la Vida de ese reino. Todo esto no debe contemplarse desde el punto de vista de la conciencia humana, ni considerarse las normas humanas del desenvolvimiento y la percepción, como que ocupan un lugar prominente en esta evolución de la vida divina. Esta entidad viviente tiene un objetivo distinto de la vida que anima al cuarto reino de la naturaleza. Sin embargo, tres influencias logoicas fundamentales, tres alientos superiores o tres vibraciones de rayo, forman la vida, cualidad y apariencia de este reino. Este tema es demasiado intrincado para que sea realmente comprendido y el lector haría bien en aceptar simplemente y con reservas mis afirmaciones, y comprender que cuando él llegue a ser un miembro de ese gran conjunto de iniciados de la sabiduría, entonces lo que ahora es inexplicable para él podrá ser comprensible y cuando se ubique en su correcto lugar en el esquema de las cosas, no le parecerá tan extraordinario ni peculiar.

B. Los cinco secretos de los reinos de la naturaleza

Existe un secreto en cada uno de los cinco reinos de la naturaleza, que concierne a la relación que existe entre la evolución humana y la totalidad, y le es revelado al iniciado en cada una de las cinco iniciaciones, en las cuales se explica uno de los cincos secretos, y por mi parte trataré de interpretar simbólicamente sus cinco antiguos nombres o signos: [i239]

1. El reino mineral El secreto del brillo de la luz.
   
2. El reino vegetal El secreto del perfume sagrado.
   
3. El reino animal El secreto de seguir el rastro.
   
4. El reino humano El secreto del doble sendero, o del doble aliento.
   
5. El reino de las almas El secreto de la rosa dorada de luz.


Las formas simbólicas que ocultan estos cinco secretos que se imparten a la inteligencia del iniciado, son:

1. El secreto mineral El diamante de color azul blanco.
   
2. El secreto vegetal El cubo de madera de sándalo en el corazón del loto.
   
3. El secreto animal El manojo de hojas de ciprés sobre una urna funeraria
   
4. El secreto humano El cordón dorado retorcido, con siete nudos.
   
5. El secreto egoico El loto cerrado, con siete rayos azules.


Sea como fuere, predominan actualmente en los cinco reinos algunas de las siete influencias logoicas; en cuatro casos controlan dos rayos y en el reino vegetal tres. No debe olvidarse que estos rayos se relacionan entre sí, y en esta gran trama y urdimbre de las fuerzas planetarias y solares, cada uno de los reinos está influenciado por cada rayo; sin embargo, algunos rayos controlan siempre y otros dominan cíclicamente. Los rayos determinan la cualidad de la vida manifestada e indican el tipo de la apariencia.

Continuando con la consideración de las tres divisiones del reino vegetal podría decirse que el:

6to. Rayo ......... Determina el tipo, especie, apariencia, fuerza, tamaño y naturaleza de los árboles en nuestro planeta.
   
2do. Rayo ........ Es la influencia benéfica que se expresa por medio de los cereales y las flores.
   
4to. Rayo .......... Es la cualidad de la vida que se expresa por medio de las hierbas y plantas silvestres de la vida vegetal, las cuales forman “la alfombra verde en la que danzan los ángeles”.


Un importante acontecimiento simbólico ha culminado [i240] al finalizar la Era pisciana, periodo de influencia del sexto rayo, que ha consistido en la devastación mundial de los bosques, los cuales fueron sacrificados en todas partes del mundo para satisfacer las necesidades del ser humano. De ese modo, esas formas vegetales de vida que estaban preparadas para la iniciación han sido sometidas a la acción del fuego. El agente principal para el desarrollo de este reino ha sido el agua, y este nuevo acontecimiento de unir el fuego y el agua en dicho reino, constituyó el hecho subjetivo que provocó el advenimiento de la era del vapor. Los grandes incendios de bosques que actualmente son una amenaza en diferentes partes el mundo, se relacionan también con la “iniciación por medio del fuego” de un reino que hasta ahora había sido controlado y dirigido en su crecimiento por el elemento agua.

En forma similar, la entrada del séptimo rayo inauguró un extraordinario acontecimiento en el reino mineral, a lo cual me referí en un libro anterior. Debido al efecto producido por el sonido y el fuego, el reino mineral también ha pasado una iniciación, pues durante la guerra mundial, en las fábricas de acero y otras industrias donde el metal es trasmutado en artículos para uso del ser humano, el mundo de los minerales y la entidad que anima ese mundo, están pasando por una iniciación superior. Esto se ha podido realizar debido a que el rayo de la personalidad de la entidad que se manifiesta a través de este reino se sometió al fuego iniciático. Lógicamente esto está expresado en forma simbólica, único modo que el ser humano pueda captar algún aspecto de esta verdad planetaria. Es un hecho interesante, aunque de poca importancia, que en todas las iniciaciones de los reinos de la naturaleza, el Logos planetario de un rayo dado, siempre actúa como el Iniciador. Dicho rayo cambia cíclicamente. Actualmente, por ejemplo, en las iniciaciones superiores conferidas a la humanidad, no sólo oficia el Cristo como primer Iniciador, y participa el Anciano de los Días -la personificación de nuestro Logos planetario (en forma activa o detrás [i241] de la escena-), sino que detrás de Ambos se halla ahora el Señor del quinto Rayo de Conocimiento y Comprensión.

Un punto muy interesante podría observarse en esto. Es bien sabido esotéricamente que el reino vegetal trasmite y trasforma el fluido pránico vital para las otras formas de vida de nuestro planeta. Esto constituye su divina y excepcional función. Este fluido pránico, como luz astral, refleja el divino akasha. Por lo tanto, el segundo plano se refleja en el plano astral. Quienes tratan de leer los archivos akáshicos, o se empeñan por actuar impunemente en el plano astral y estudian allí detenidamente el reflejo de los acontecimientos en la luz astral, deben ser, obligatoriamente y sin excepción, estrictamente vegetarianos. Lo que da fuerza y veracidad a este enunciado es que detrás de la insistencia del vegetarianismo y sobre la necesidad de seguir ese régimen, se halla la antigua tradición del pueblo atlante. El no ajustarse a esta sabia regla ha hecho que gran parte de los psíquicos de hoy interpreten erróneamente los archivos akáshicos y astrales, dando lugar a la extravagante e incorrecta interpretación de las vidas pasadas. Sólo aquellos que durante diez años han sido estrictamente vegetarianos, pueden trabajar en lo que llamamos “el archivo de la Luz astral”. Cuando logran agregar a sus cuerpos astral y físico purificados, la luz de la razón y la iluminación de su mente enfocada (que raras veces poseen), entonces llegan a interpretar con exactitud los fenómenos astrales. Su vínculo con el reino vegetal es muy estrecho e inquebrantable, y este eslabón o cadena vinculadora, lo conduce a trasponer el portal a la escena de sus investigaciones. Pero a no ser que el campo del servicio sea el objetivo que se persigue al ajustarse a un régimen vegetariano, las excusas para seguir y adoptar tal régimen, son generalmente inútiles y sin importancia. Desde el punto de vista de las eternas verdades, lo que un ser humano come o viste, el acérrimo fanático lo ve bajo un aspecto muy distinto. Permítanme repetir: [i242] el problema de quitar la vida (la del reino animal o vegetal), es mucho más grave de lo que creemos y debe encararse desde un ángulo (no sólo de grado sino de clase) distinto del de quitar la vida a un ser humano. Los tres aspectos de la divinidad se unen en el ser humano, y nadie debe interferir el destino de un divino hijo de Dios. La actitud referente a los dos aspectos de la divinidad, tal como se encuentran en los reinos subhumanos, es muy distinta, y la verdad emergente difiere de lo que creen las pequeñas mentalidades.

La influencia de los tres rayos fusionados en el reino vegetal, que también son los tres rayos correspondientes a los números pares 2-4-6, han producido la cuádruple perfección de este reino que no tiene paralelo con ningún otro. Los rayos son responsables de este resultado, y su efecto puede verse en el análisis siguiente:

2do. Rayo ........ El resultado de la influencia de este rayo, que afluye cíclicamente a través de este reino, ha producido su magnetismo y atracción.
   
4to. Rayo ........ Este rayo de lucha y conflicto tiene como objetivo producir la armonía entre la forma y la vida, y ha logrado sintetizar y armonizar el color de la naturaleza. Al decir “color de la naturaleza”, automáticamente pensamos en el reino vegetal y la armonización de la vegetación.
   
6to. Rayo ........ El crecimiento hacia la luz es el efecto de la influencia de este rayo, además de la tendencia normal a evolucionar de todas las formas de vida. Ha hecho aflorar a la superficie las latentes semillas del reino vegetal, inherentes al suelo. Constituye la energía de la exteriorización.


El efecto conjunto de estos tres rayos que actúan al unísono, ha producido el cuarto resultado, la fragancia de las flores en los ejemplares superiores del reino vegetal. La fragancia puede ser mortal o vitalizadora, [i243] deliciosa o repulsiva. Atrae y constituye parte del aroma de este reino que se presiente en el aura planetaria, aunque la humanidad no lo reconozca totalmente. Un perfume puede ser aislado. Sin embargo, el perfume de un reino es un fenómeno muy conocido por el iniciado.

Sería interesante que los estudiantes buscaran analogías similares en los otros reinos de la naturaleza, recordando que este reino se halla esotéricamente más avanzado que los otros, y que en su perfeccionamiento participan tres rayos. Podría decirse que los tres afectan finalmente a cada uno de los otros tres reinos.

En la próxima subraza, el segundo rayo comenzará a ejercer influencia sobre el reino mineral.

En la próxima raza raíz, el quinto rayo comenzará a ejercer su poder en el reino animal, estimulando gradualmente la mente instintiva del animal, hasta lograr el mismo grado de vibración del rayo del intelecto o del conocimiento. Esto organizará el cerebro del animal y transferirá el poder del centro del plexo solar al centro coronario; en consecuencia, producirá un cambio en la polarización animal y aumentará la actividad del cerebro.

Cuando finalice esta ronda, el rayo monádico al que pertenecen los entes avanzados de la humanidad, será tan poderoso que se producirá una marcada precipitación del primer rayo, que estimulará la voluntad individual. Por lo tanto, con el desenvolvimiento del aspecto voluntad del género humano alcanzarán las siguientes etapas de importancia psicológica:

1. Instinto. 2. Aspiración emocional.
3. Intelecto. 4. Centralización mental.
5. Propósito egoico. 6. Voluntad espiritual.
7. Intención divina.


Dichas etapas están latentes en todos nosotros, se relacionan con los siete principios del ser humano, se expresarán en la humanidad [i244] avanzada como “aspectos de la psiquis” y, psicológicamente, durante las últimas etapas del desarrollo humano, etapas que deberían despertar mayor interés en los investigadores y educadores y desarrollarse en el niño y el adolescente. Actualmente se expresan como etapas asignadas para el desenvolvimiento de los discípulos e iniciados, e indican el lugar que ocupan en el Sendero, de allí su utilidad práctica.

En el reino de las almas, el cuarto rayo completará el trabajo de las dos próximas rondas, pero este período es tan remoto que no es necesario ocuparnos de él.

En el reino vegetal el trabajo del segundo rayo de Amor-Sabiduría se observa simbólicamente en una de sus mayores culminaciones. Su atracción, en lo que respecta al sentido de la belleza, color, forma, distribución y fragancia, se observa en todas partes, y si poseyeran el de la visión, aparecería en toda su gloria la realidad y la síntesis de la vida. Pero así como el último de los cinco sentidos que hace sentir su presencia en el ser humano, el olfato, es aún muy poco comprendido y sus implicaciones no han sido percibidas, como tampoco su relación con la mente analítica y discriminadora ha sido valorado científicamente, así la “atracción”, hablando esotéricamente, del reino vegetal, permanece incomprendida, pues constituye la radiante vestidura del planeta revelada por el sol, la expresión lograda de la vida animadora de este reino de la naturaleza y el efecto de la manifestación de los tres aspectos divinos y activos en este “peculiar” hijo de la divinidad, a medida que cumple su destino en la forma y a través de la materia.

El problema del magnetismo está estrechamente vinculado con el problema del sexo. En el estudio oculto respecto a la diseminación de la vida simiente y de los gérmenes del reino vegetal, en la comprensión de la parte desempeñada por esos organismos milagrosamente desarrollados -las hormigas y las abejas-, y posteriormente en la investigación realizada por quienes han despertado la visión sobre el trabajo de los constructores etéricos, los duendes [i245] y las hadas, se arrojará una nueva luz sobre el sexo y la función que cumple en la interrelación de las vidas y la creación de las formas. Respecto a este aspecto de la verdad profundamente esotérica no puedo explayarme, porque es el efecto de la actividad de las vidas solares del sistema solar y no es posible ocuparnos de ellas, ni dilucidar este tema de tal modo que tenga un valor constructivo para el lector común.

Lo que no tenga un valor esotérico inmediato en esta época de apremio mundial, puede muy bien ser relegado para el futuro.

C. Los planetas y los reinos de la naturaleza

En el reino vegetal predomina la influencia de Venus, aunque esto les parezca extraño a algunos estudiantes ocultistas. Venus y Júpiter influyen poderosamente sobre este reino de las formas.

Será interesante observar que todos los planetas están estrechamente relacionados con todos los reinos, pero tal relación no debe confundirse con los rayos planetarios, o con el hecho de que algunos planetas son considerados “planetas sagrados” y otros no; empleo las palabras “influencia planetaria” en el mismo sentido que las aplica el astrólogo, pues éste no se ocupa de los rayos planetarios básicos. Por lo tanto, podría decirse que las relaciones planetarias de este ciclo son:

1.El reino mineral Plutón y Vulcano.
2. El reino vegetal Venus y Júpiter.
3. El reino animal La Luna y Marte. 
4. El reino humano Mercurio y Saturno
5. El reino de las almas Neptuno y Urano.
6. El sintetizador de los cinco El Sol.


Además se sienten otras influencias planetarias así como fuerzas ocultas que actúan sobre nuestra vida planetaria, pero las clasificadas son las [i246] influencias principales que producen los resultados deseados en los reinos de la naturaleza, de acuerdo al Plan. Debe recordarse que estas influencias cíclicas predominan actualmente y cambian ciclo tras ciclo. Un discípulo en el sendero, por ejemplo, está fuertemente influenciado por Mercurio y Saturno, pero cuando comienza a entrenarse para la primera iniciación debe encarar las influencias de Plutón y Vulcano; el entrenamiento para la segunda iniciación lo pone bajo las influencias de Neptuno, Venus y Júpiter, que bregan por controlarlo. El vínculo con el reino vegetal es entonces muy fuerte, de allí los frecuentes “perfumes astrales” que el discípulo percibe. Antes de alcanzar la primera iniciación, su interno mundo mineral estático se ha desintegrado.

En la tercera iniciación, la Luna y Marte luchan por obtener la ascendencia, y allí reside su campo de batalla. Por eso en la gran Transfiguración el cuerpo se “transfigura” en señal de triunfo. En la cuarta iniciación Mercurio y Saturno actúan como grandes trasladadores, y llevan al discípulo hasta el portal de la Iniciación. Cuando se pasa la iniciación final, la actividad de Urano y la entrante fuerza de Júpiter producen la reorganización, que da por resultado la emancipación final. La realidad y la complejidad del tema son aquí evidentes.

El color que se expresa en el reino vegetal es otra gran influencia de los rayos. El color básico, el verde, indica la potencia de Saturno. Esotéricamente hablando, el reino vegetal está en una etapa avanzada en el sendero del discipulado, y debido a ello se hallan activos Saturno y Marte. La influencia de este último planeta puede observarse actualmente en las flores, en la profusión de los colores rojo, rosado, amarillo y anaranjado de las flores.

Repito, le será útil al lector observar mentalmente la relación que existe entre el crecimiento y el idealismo de sexto rayo. De ello [i247] podrá conocer la parte que desempeña el Rayo de Devoción cuando fomenta el impulso de evolucionar. Es el crecimiento hacia un ideal, prototipo o arquetipo divino. Aquí subyace el secreto de este reino, oculto en la palabra “transformación” porque los rayos 2, 4, 6, son grandes transformadores. La clave del secreto reside en el proceso de asimilación y en las fuerzas constructoras que transmutan los minerales asimilados, la humedad absorbida, el alimento del aire y la ofrenda de los reinos de los insectos a los cuerpos manifestados, los colores brillantes, las auras magnéticas y los perfumes que se destilan en este reino. Gran parte de este renglón ha sido el tema de investigación de los científicos modernos, pero hasta que no reconozcan la realidad de las influencias de los rayos y la parte que desempeñan en la producción de dichos factores, no descubrirán el verdadero secreto que se observa en las transformaciones.

Por lo tanto, el lector cuidadoso verá que en la relación que existe entre los rayos y los reinos de la naturaleza y en la similitud de los rayos que actúan en los reinos que difieren ampliamente, se hallará el punto de contacto o la puerta de entrada por la cual pueden hacer contacto entre sí.

Por ejemplo, en los reinos humano y vegetal las influencias entran (empleando las palabras en sentido esotérico) a través del cuarto rayo, que influye a las formas de ambos reinos. La relación que existe entre el reino vegetal y el reino de las almas, está en el segundo rayo. Este rayo comienza a hacer sentir su presencia en el reino mineral, y de allí la facilidad para trabajar y utilizar materialmente las formas de este reino. Quizás debería decir abusar de ellos. Dentro de poco tiempo el quinto rayo, como se habrá observado, hará sentir su poder en el reino animal, y se establecerá una relación cada vez más estrecha entre los seres humanos y los animales.

Repito, los rayos manifestados en cualquier época establecerán relaciones [i248] entre los reinos, aumentarán la interacción de las fuerzas y el intercambio de energías, produciendo así nuevos efectos, nuevas formas de vida y nuevas maravillas en el mundo de los fenómenos. El ser humano tiende también a creer que las influencias de su rayo (el que predomina en su propio reino) deben ser de gran importancia y las más poderosas. Pero ahora no es así.

No es posible estudiar detalladamente ni hacer un verdadero análisis del efecto y el trabajo de los rayos respecto al reino animal. Sin embargo, debe recordarse que las raíces de la psicología humana oculta esta expresión de Dios. La humanidad expresa dos aspectos del alma -el alma animal y el alma divina- y ambos, combinados y fusionados en el ser humano, constituyen el alma humana. Este hecho origina los principales problemas del ser humano, y estos dos factores lo envuelven en la larga lucha que conduce a la liberación del alma divina por la sublimación del alma animal. En estas palabras hay mucho para reflexionar: “Los dos serán uno”. Este trabajo comienza a realizarse en el reino animal y constituye su “secreto”, de allí el empleo de la palabra transfusión, en conexión con ello. El primer resultado de este proceso secreto, fue la individualización. Su efecto final y culminante puede observarse en las cinco etapas del proceso iniciático, que lleva a la eventual transfiguración y liberación. Sin embargo, todo el trabajo es el despliegue de una gran revelación del alma de Dios, y sólo cuando separamos a la humanidad de este proceso revelador descubrimos que los secretos, los problemas, las dificultades y los misterios son insolubles. Se está desarrollando paulatinamente una conciencia, percepción y sensibilidad al contacto, cada vez más amplia e incluyente, lo cual constituye la conciencia de Dios, la percepción del Logos solar y la sensibilidad de un Hijo cósmico de Dios.

La forma a través de la cual esa Vida se expresa, y el mecanismo [i249] sensorio de respuesta a través del cual actúa esa Conciencia, tiene importancia secundaria y es un mecanismo automático. Sin embargo, nos hemos identificado con ese mecanismo y hemos olvidado que es sólo la expresión de un aspecto de la conciencia que indica en un momento dado la etapa de evolución de la entidad animadora. Permítanme repetir: Los dos factores de mayor importancia durante la manifestación son: La conciencia evolucionante y la vida en manifestación. Cuando esto se tiene en cuenta, se observará que cada etapa del camino aparece como un reino de la naturaleza. Cada reino lleva el aspecto conciencia hacia una etapa superior de perfección y expresa una mayor sensibilidad y respuesta a las condiciones externas e internas circundantes, que las del reino precedente. Cada uno manifiesta una revelación más plena de la gloria interna u oculta. Sin embargo, cuando una unidad de vida se sumerge en la forma y cuando la conciencia se identifica (en tiempo y espacio) con una forma determinada, no le es posible comprender su divinidad ni expresarla conscientemente. Su psicología corresponde a lo parcial y a lo particular, y no a la totalidad y a lo universal. Cuanto mayor y más íntima sea la identificación con el aspecto forma, mayores serán la síntesis y también la unidad inferior, pero al mismo tiempo tanto mayor es la oscuridad y, hablando simbólicamente, la prisión será más densa. Tal es la conciencia de los reinos inferiores o subhumanos de la naturaleza. Cuanto más se identifica la unidad de vida con “el que es consciente”, tanto mayor será la superior, aunque distinta unidad y síntesis. Así también será la conciencia de los tres reinos superiores, lo súper-humano. La tragedia, el problema y la gloria del ser humano residen en que puede identificarse con ambos aspectos -la forma y la vida-; su estado psicológico es tal que durante el periodo en que forma parte del reino humano, su reino, [i250] su conciencia fluctúa entre estos pares de opuestos. Puede identificarse con las formas subhumanas; invariablemente lo hace en las primeras etapas, y con el aspecto vida en las etapas finales. En las etapas intermedias el individuo común es desgarrado violentamente por ambos, siendo él mismo el campo de batalla.

Todo el problema del dolor y el sufrimiento, según hoy se lo comprende, está vinculado con este estado de conciencia, incidental a la percepción de los pares de opuestos. El animal sufre, pero lo hace en forma física y sensoria. El ser humano sufre, pero lo hace física, sensoria y también mentalmente; el sufrimiento mental se debe a que ha desarrollado ciertos aspectos de la mente inferior -presentimiento, memoria, imaginación, poder de visualizar, remordimiento e impulso innato de alcanzar la divinidad, que trae consigo una sensación de pérdida y de fracaso. Los padecimientos de Dios (a los que se refieren las escrituras del mundo, tan misteriosamente) están lejos de ser sensorios y son mentales e intuitivos, pero no me detendré a dilucidar este misterio. Los padecimientos de la humanidad son primordialmente personales; los de Dios son preeminentemente impersonales y se relacionan con la totalidad. Me referí a ello porque quería describir la síntesis del desenvolvimiento de lo incoado a lo sensorio, de esto a lo que se comprende mentalmente, y de allí a lo que se “aprecia divinamente”, como lo define el ocultismo. He hecho descripciones que abarcan la totalidad. Traten de pensar en la totalidad y no adapten cada detalle al todo y recuerden que lo que puede parecer una contradicción quizás sea únicamente un fragmento transitorio, al cual aún no pueden relacionar ni aplicar.

En el reino animal se observan los primeros indicios de dolor o sufrimiento, mientras que en los animales superiores y domésticos ambos procesos educativos están más claramente definidos. [i251] El trabajo que realiza el ser humano con los animales tiene resultados poderosos y, oportunamente, conducirá a reabrir la puerta al reino humano. Parte del trabajo ya efectuado por el ser humano ha excedido la expectativa divina y puede justificar el apresuramiento del Plan. Ahora clasificaremos lo expuesto sobre este reino y los rayos, como lo hicimos con los otros dos reinos.