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II. Las Siete Leyes del Alma o Vida Grupal - Parte 5

b. LAS CARACTERÍSTICAS DE LOS NUEVOS GRUPOS

Este breve resumen describirá algunos de los requisitos elementales y, mediante una amplia generalización, indicará las principales razones de por qué se están formando dichos grupos. Quizás podríamos ahora ampliar algo más nuestra visión y al mismo tiempo, considerar a los grupos en forma más detallada.

Una de las características que distinguirá a los grupos de servidores y conocedores del mundo, es que la organización externa que los mantendrá integrados será tan nebulosa y sutil que prácticamente no podrá observarse externamente. El grupo se mantendrá unido por una estructura interna de pensamiento y una estrecha interrelación telepática. Los Grandes Seres, a Quienes todos tratamos de servir, se vinculan de esta manera y pueden, con el mínimo requerimiento y el menor desgaste de fuerza, ponerse en contacto mutuo. Ellos están sintonizados con una vibración particular, y estos grupos tendrán que sintonizarse así. De esta manera se agruparán personas de naturalezas muy [i184] variadas que pertenecen a los distintos rayos y nacionalidades, producto de los diversos patrimonios y del medio ambiente. Además de estos factores que atraen inmediatamente la atención, habrá también una diversidad similar en la experiencia de la vida, adquirida por las almas implicadas. La complejidad del problema que enfrentan los miembros del grupo aumenta su magnitud si se recuerda el largo camino que cada uno ha recorrido y los numerosos factores y características que emergen del distante y oscuro pasado, contribuyendo a hacer de cada persona lo que es. Si nos detenemos a pensar sobre las dificultades y las posibles barreras que pueden anteponerse al éxito, lógicamente surgen los interrogantes: ¿Qué hace posible el establecimiento de esta interrelación grupal? ¿Qué proporciona el nivel común de igualdad? Es de trascendental importancia responder a estas preguntas y exige tratarlas con franqueza.

En la Biblia se dice: “En Él vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser”. Tal afirmación es una fundamental ley de la naturaleza y la base enunciada de la relación que existe entre el alma individual que actúa en un cuerpo humano y Dios. Esto determina, hasta donde puede comprenderse, la relación entre alma y alma. Vivimos en un mar de energías. Constituimos un conglomerado de energías y todas están estrechamente interrelacionadas y forman el cuerpo sintético de energía de nuestro planeta.

Debe recordarse que el cuerpo etérico de cada forma de la naturaleza es una parte integrante de la forma sustancial de Dios Mismo, no la forma física densa, sino lo que los esotéricos consideran como la sustancia que construye la forma. Empleamos la palabra “Dios” para significar esa expresión de la Vida Una que anima a todas las formas del plano objetivo externo. Por lo tanto, el cuerpo etérico o de energía de cada ser humano, es parte integrante del cuerpo etérico del planeta mismo [i185] y, por consiguiente, del sistema solar. Por este medio todo ser humano se relaciona básicamente con toda expresión de la Vida divina, sean diminutas o gigantescas. La función del cuerpo etérico consiste en recibir impulsos de energía y en ser llevado a la actividad por esos impulsos o corrientes de fuerza, que emanan de alguna fuente de origen. En realidad, el cuerpo etérico no es nada más que energía, compuesto por miríadas de hilos de fuerza o diminutas corrientes de energía, relacionadas, por su efecto coordinador, con los cuerpos emocional y 

mental y con el alma, constituyendo corrientes de energía que a su vez tienen su efecto sobre el cuerpo físico, poniéndolo en actividad de acuerdo a la naturaleza y al poder de la clase de energía que pueda predominar en el cuerpo etérico en cualquier momento dado.

A través del cuerpo etérico circula energía que emana de alguna mente. Las masas humanas responden inconscientemente a los mandatos de la Mente Universal; esto se complica en nuestra era y época debido a la creciente respuesta a las ideas masivas de las mentalidades humanas que evolucionan rápidamente, denominadas a veces opinión pública. Dentro de la familia humana existen también quienes responden a ese grupo interno de Pensadores que, cuando trabajan con materia mental, controlan desde el aspecto subjetivo de la vida el surgimiento del gran Plan y la manifestación del propósito divino.

Este grupo de Pensadores abarca siete divisiones principales, y está presidido por tres grandes Vidas o entidades supraconscientes. Son el Manu, el Cristo y el Mahachohan. Emplean principalmente el método de influenciar las mentes de los adeptos e iniciados. Estos últimos influencian a su vez a los discípulos del mundo, los cuales cada uno en su propio lugar y bajo su responsabilidad, desarrollan su concepto del Plan y tratan de expresarlo hasta donde les es posible. Hasta ahora esos discípulos han [i186] trabajado muy solos, excepto cuando por relación kármica se conocen mutuamente y la intercomunicación telepática ha sido fundamentalmente limitada a la Jerarquía de adeptos e iniciados en encarnación o fuera de ella, y a Su trabajo individual con Sus discípulos. Por lo tanto, los grupos que hasta ahora han trabajado en forma totalmente subjetiva, pueden ser y serán

duplicados externamente, y los nuevos grupos que vendrán a la existencia serán mayormente exteriorizaciones -experimental aún- de los grupos que han actuado detrás de la escena, impulsados por el grupo central, la Jerarquía de Maestros.

Este experimento se ha efectuado primordialmente para lograr la integración grupal y también hallar el método por el cual pueda llevarse a cabo. La razón de por qué están experimentando esta idea grupal quienes se hallan en el aspecto interno, se debe a que es definidamente una tendencia de la nueva era. Tratan de emplear la preponderante tendencia del ser humano hacia la coherencia y la integración. Sin embargo, debe recordarse constantemente que si no hay una coherencia subjetiva, todas las formas externas deben oportunamente desintegrarse, o de lo contrario nunca se fusionarán. Únicamente los vínculos y el trabajo subjetivos determinan el éxito, lo cual (particularmente en el nuevo trabajo grupal) debe basarse en las relaciones egoicas y no en los apegos y predilecciones personales, que son de ayuda cuando hay un reconocimiento de la relación egoica. Donde esto existe entonces se puede formar algo tan inmortal y duradero como el alma misma.

Debería aclarar un punto práctico. Durante algún tiempo tales grupos constituirán lo que podrían denominarse “grupos cánones”, y deben ser formados lentamente y con mucho cuidado. Cada persona que forme parte de los nuevos grupos será examinada, probada y sometida a una gran presión, necesaria si se quiere que los grupos perduren durante el actual período de transición. Resulta difícil a los discípulos formar [i187] estos grupos. Los métodos y las técnicas serán muy diferentes de las del pasado. La gente podrá demostrar un verdadero deseo de participar en la vida grupal y formar parte de la actividad grupal, pero la verdadera dificultad consistirá en adaptar su vibración y vida personales a la vida y al ritmo del grupo. El estrecho sendero que todos los discípulos deben recorrer (y en las primeras etapas estos grupos estarán compuestos principalmente por quienes se hallan en el Sendero de Probación o en el Sendero del Discipulado) exige obediencia a ciertas instrucciones que fueron trasmitidas desde la antigüedad. Deben ser seguidas voluntariamente y con los ojos abiertos, pero no se exige ni se espera al pie de la letra el cumplimiento de la ley. Siempre es necesario que haya cierta flexibilidad dentro de los límites autoimpuestos, pero esa flexibilidad no debe ser consecuencia de la inercia personal o dudas mentales.

Este gran experimento en el entrenamiento grupal, que está siendo ahora iniciado en la tierra por medio de una nueva actividad de la Jerarquía, demostrará a los Guías observadores de la raza hasta qué punto los discípulos y aspirantes mundiales están preparados para subordinar sus intereses personales al bien grupal, y hasta qué punto son sensibles, como grupo, a la instrucción y a la orientación, y cuán libres están los canales de comunicación entre los grupos del plano externo y el grupo interno, y entre ellos y las masas a las cuales esperan eventualmente llegar. El grupo de discípulos de un Maestro, en el mundo interno de la vida, forma un organismo integrado, caracterizado por la vida, la interacción y el amor mutuos. Las relaciones de ese grupo son totalmente mentales y astrales, de allí que no se perciban las limitaciones de la fuerza del cuerpo etérico, del cerebro físico y del cuerpo físico denso. Esto facilita grandemente la comprensión interna y la interacción recíproca. Sería conveniente recordar que el poder astral se siente aquí con mayor fuerza que en los niveles físicos, por eso que en todos [i188] los tratados sobre el discipulado y en el entrenamiento para lograrlo se insiste que debe ser controlado el deseo emocional.

Actualmente se está haciendo un esfuerzo para ver si se pueden establecer la actividad y la interacción grupales en el plano físico, lo cual, como consecuencia, incluirá el mecanismo del cuerpo físico y el cerebro. Por lo tanto, las dificultades son muy grandes. ¿Qué técnica debe emplearse para manejar esta difícil situación, que sólo es posible porque el trabajo realizado por los grupos de los Maestros ha sido tan eficaz? Mucho dependerá de cómo se reaccione a esta interacción y de lo que ella significará en nuestras vidas. Esto implica un método ocultista muy práctico de trabajo. Las reacciones físico-astrales del cerebro deberían considerarse que no existen y ser relegadas debajo del umbral de la conciencia grupal, para que mueran por inanición. Deben ponerse constantemente de relieve las relaciones mentales y egoicas.

 c. LA NATURALEZA EXPERIMENTAL DE LOS GRUPOS

He dicho que estos grupos constituyen un experimento. Este experimento es de naturaleza cuádruple y una concisa enunciación al respecto podría aclarar cualquier conjetura:

I. Los experimentos son para establecer e iniciar puntos focales en la familia humana, por cuya mediación pueden afluir ciertas energías a toda la raza humana, y éstas son diez.

II. Los experimentos son para inaugurar ciertas nuevas técnicas para trabajar y establecer los medios de comunicación. Debe observarse que las últimas tres palabras resumen toda la cuestión. Estos grupos están destinados a facilitar la interrelación o comunicación, de la manera siguiente:

1. Tratarán de facilitar la comunicación entre los individuos a fin de conocer las reglas y los [i189] métodos por los cuales pueda ser trascendida la palabra e iniciar el nuevo sistema de intercambio. Oportunamente las comunicaciones se harán:

a. Entre alma y alma, en los niveles superiores del plano mental. Esto implica un total alineamiento a fin de que alma-mente-cerebro estén completamente unificados.

b. Entre mente, en los niveles inferiores del plano mental, lo cual implica la total integración de la personalidad o yo inferior, a fin de que la mente y el cerebro se unifiquen.

Los estudiantes deben recordar estos dos contactos característicos y tener presente también que no es necesario que el contacto mayor incluya al menor. Es muy posible realizar la comunicación telepática entre los distintos aspectos del ser humano, en los variados grados de evolución.

2. Estos grupos trabajarán para establecer la comunicación entre el plano de la iluminación y de la razón pura (el plano búdico) y el plano de la ilusión (el plano astral). Debe recordarse que nuestra gran tarea es disipar la ilusión mundial mediante la iluminación o la afluencia de luz. Cuando se hayan formado suficientes grupos que tengan este objetivo, entonces habrá en el plano físico canales de comunicación que actuarán como mediadores entre el mundo de la luz y el mundo de la ilusión. Estos serán los transmisores de ese tipo de energía que destruirá el maya o la ilusión existente y disipará las antiguas formas mentales, y liberarán la luz y la paz iluminará el plano astral, disipando así la naturaleza ilusoria de su vida.

3. A través de otros grupos debe afluir otro tipo de energía que producirá un tipo distinto de interrelación y comunicación. Dichos grupos curarán debidamente las personalidades individuales, en todos los aspectos de su naturaleza. [i190] El trabajo propuesto consiste en trasmitir inteligentemente la energía a las diversas partes de la naturaleza -mental, astral y física- del ser humano, por la correcta circulación y organización de la fuerza. Oportunamente la curación deben llevarla a cabo los grupos que actúan como intermediarios entre el plano de la energía espiritual (la energía del alma, la intuitiva o de la voluntad) y el paciente, o el grupo de pacientes, y esto debe tenerse en cuenta y también presente la idea grupal, porque establecerá la diferencia entre los métodos de la nueva era y los del pasado, y el trabajo será grupal y para el grupo. Sus miembros trabajarán como almas y no como individuos. Aprenderán a trasmitir a los pacientes energía curativa extraída de la reserva de fuerzas vivientes.

4. Otros grupos de comunicadores actuarán como transmisores de dos aspectos de la energía divina, conocimiento y sabiduría, considerados en términos de energía. Su tarea será educar a las masas, como intermediarios directos entre la mente superior y la mente inferior y se ocuparán de la construcción del antakarana, pues su tarea es vincular los tres puntos de valor en el plano mental -la mente superior, el alma y la mente inferior- a fin de establecer el antakarana grupal entre el reino de las almas y el mundo de los seres humanos.

5. Algunos grupos se ocuparán especialmente del trabajo político más que de cualquier otra actividad. Trasmitirán esa “cualidad que impone” autoridad, de la cual carecen otras ramificaciones de esta actividad grupal divina. El trabajo es mayormente de primer rayo. Incluye el método por el cual la divina Voluntad; actúa en la conciencia de las razas y las naciones. Los miembros de este grupo estarán regidos en gran parte por el primer rayo. Su trabajo consiste en actuar como canales de comunicación entre el departamento del Manu y [i191] la raza humana. Es algo honroso llegar a ser canales de la Voluntad de Dios.

6. Otros grupos serán, en forma excepcional, canales entre la actividad del segundo rayo, la del Instructor Mundial (cargo que el Cristo desempeña en la actualidad) y el mundo de los seres humanos. La energía de segundo rayo debe fluir a través de los grupos de estudiantes, creyentes y los grupos afines de pensadores y trabajadores, de los cuales se formaron muchos. Esto debe tenerse en cuenta. Repito, habrá muchos de estos grupos que erigirán la estructura de la nueva religión mundial.

7. Unos pocos grupos desempeñarán una interesante función, sin embargo pasará mucho tiempo antes de que se materialice, o por lo menos hasta que se comprenda mejor el trabajo de las fuerzas constructoras del Universo. Esto coincidirá con el desarrollo de la visión etérica. Dichos grupos actuarán como canales de comunicación o intermediarios, entre las energías que constituyen las fuerzas constructoras de formas, las que confeccionan la vestidura externa de Dios y los espíritus humanos. Por lo tanto, se observará que existe la posibilidad de que el principal trabajo inicial se relacione con el problema de la reencarnación. Tal problema tiene que ver con la apropiación de una vestidura externa o forma, de acuerdo a Ley de Renacimiento. Por lo tanto, cuando estos grupos se organicen, al principio sus miembros trabajarán sobre dicho tema. Emprenderán un estudio más profundo y distinto sobre la Ley de Renacimiento que hasta ahora.

8. Algunos grupos de comunicadores y transmisores de energía llevarán la luz a los grupos de pensadores. Serán los iluminadores de los pensamientos grupales. Trasmitirán la energía de un centro de pensamiento a otro, sobre todo la energía de las ideas. Que es su principal función. Debe recordarse que el mundo de las ideas constituye un mundo de centros de fuerza dinámica. Esto no debe olvidarse. Se debe establecer contacto con esas ideas y tenerlas en [i192] cuenta. Su energía debe ser asimilada y trasmitida, y ésta es la función de esos centros de fuerza que se expresarán en estas líneas de actividad.

9. La tarea específica de los grupos que trabajan en otra categoría consistirá en estimular las mentes de los seres humanos a fin de que tenga lugar el alineamiento. Ahora actúan principalmente como canales de comunicación entre el alma de un ser humano y el alma de una forma, los cuales serán grandes psicómetras, porque su alma es sensible al alma de otras formas de vida -humana o no-, evocan, principalmente, el alma del pasado, vinculándola con el presente y descubren indicios del futuro.

10. Los miembros de otros grupos serán los comunicadores entre el tercer aspecto de la Deidad, que se expresa por medio del proceso creador y el mundo del pensamiento humano. Unirán o fusionarán creadoramente la vida y la forma. Sin darse cuenta ni comprenderlo logran ya concretizar la energía del deseo que, a su vez, produce la concretización del dinero, que en consecuencia requiere la materialización de cosas. Su tarea es muy difícil, por eso apareció en los últimos ciento cincuenta años la ciencia financiera mundial. Se ocuparán del aspecto divino del dinero, considerándolo como un medio por el cual puede llevarse a cabo el propósito divino. Manejarán el dinero como agentes por cuyo intermedio las fuerzas constructoras del universo pueden hacer el trabajo necesario; estas fuerzas constructoras (y aquí reside la clave) se ocuparán cada vez más de construir el Templo subjetivo del Señor, y de materializar lo que satisface los deseos del ser humano. Esta diferencia merece ser considerada.

III. Los grupos son la exteriorización de una existente condición interna. [i193] Debe comprenderse que estos grupos no son una causa sino un efecto. Podrán sin duda tener un efecto inicial a medida que trabajan en el físico, pero en sí son el producto de una actividad interna y subjetivo de fuerza que, forzosamente, debe llegar a ser objetivo. El trabajo de los miembros del grupo consiste en mantenerse, como grupo, en estrecha relación con los grupos internos, que forman, sin embargo, un gran grupo activo. Esta central fuerza grupal afluirá entonces a través de los grupos mientras sus miembros, como grupo:

a. Están en armonía con las fuentes internas de poder.

b. No pierden de vista el objetivo grupal, cualquiera sea.

c. Cultivan la capacidad dual de aplicar las leyes del alma a la vida individual y las leyes del grupo a la vida grupal.

d. Emplean todas las fuerzas que puedan afluir al grupo como servicio, y aprenden, por lo tanto, a registrar esa fuerza y a utilizarla correctamente.

La siguiente secuencia de afirmaciones ¿impartirá al respecto algo a nuestra mente? Son afirmaciones de hecho y no contienen nada simbólico en su terminología, excepto hasta donde las palabras constituyen símbolos inadecuados para expresar verdades internas:

1. Cada grupo tiene su contraparte interna.

2. La contraparte interna constituye un todo. Los resultados externos sólo son parciales. 

3. Estos grupos internos forman un grupo, y cada uno es la expresión de, o está regido por ciertas leyes que constituyen los factores controladores del trabajo grupal. Una ley es sólo una expresión o manifestación de fuerza, que un pensador o grupo de pensadores aplica por el poder del pensamiento. [i194]

4. Estos grupos internos, que contienen distintos tipos de fuerza y trabajan sintéticamente para expresar ciertas leyes, constituyen un esfuerzo para establecer nuevas y diversas condiciones y producir, en consecuencia, una nueva civilización. Ésta es la Nueva Era que llegará a su culminación en la Era acuariana.

5. Los grupos externos constituyen un intento y un esfuerzo experimental para comprobar hasta qué punto la humanidad está preparada para realizar tal esfuerzo.

IV. Estos grupos constituyen un experimento, y su objetivo consiste en manifestar ciertos tipos de energía que establecerán en la tierra cohesión o unificación. La actual condición de desconcierto que prevalece en el mundo, el “impase” internacional, la disconformidad religiosa, la confusión social y económica de las últimas décadas, son el resultado de energías tan poderosas -debido a su enorme ímpetu- que sólo se pueden poner en actividad rítmica por la imposición de energías más poderosas y más definidamente dirigidas. Cuando los grupos actúen adecuadamente y hayan logrado no sólo unidad grupal interna sino también armonía entre los grupos, entonces podrá realizarse un trabajo peculiar y esotérico.

Éstos son algunos de los planes que la Jerarquía trata de llevar adelante, y los verdaderos discípulos y aspirantes pueden desempeñar su parte. Se nos llama la atención sobre estos planes a fin de evocar nuestra permanente colaboración.

d. LA ASTROLOGÍA Y LOS NUEVOS GRUPOS

La Ley del Progreso Grupal contiene una de las energías que se han liberado gradualmente durante los últimos dos siglos. Una oleada más plena entró en actividad durante la Luna llena de Tauro, en mayo de 1936, y ahora podemos esperar el inminente progreso de la idea grupal, en sus aspectos buenos y malos. En diversas oportunidades se ha llamado la atención a los estudiantes sobre esta ley [i195] que está relacionada con cierto impulso originado en las mentes de los seres humanos, que es a su vez el efecto de los diversos tipos de energía que actúan sobre la tierra. “Ley del Progreso Grupal” es el nombre aplicado por los seres humanos a un tipo particular de energía que produce coherencia en los entes de un grupo, estructurándolos así en un organismo viviente. La afinidad, el objetivo y la meta grupales serán eventualmente reconocidos. En último análisis, es el surgimiento en la conciencia subjetiva, del mismo tipo de energía que produce ese aspecto de acción cohesiva que se demuestra como unión tribal, nacional o racial. Sin embargo, en este caso, el factor determinante no es una designación física, ni estos grupos tienen una base en el plano físico. Se fundamentan en el idealismo grupal que puede ser conscientemente captado cuando las unidades del grupo comienzan a funcionar en el plano mental y a desarrollar la capacidad de “reflexionar a fondo las cosas” -es decir, registrar en el cerebro lo que el alma ha comunicado a la mente. Tenemos aquí una definición del proceso de la meditación tal como debe ser practicado por quienes han logrado, mediante el alineamiento en alguna medida, contacto con el alma. Estos grupos actúan totalmente a través de una relación subjetiva que produce integración y actividad subjetivas.

Cuando lleguemos al estudio de las implicaciones astrológicas, descubriremos, en relación con estas leyes, que las energías de los signos zodiacales tienen un efecto específico sobre la energía de un Ser, cuyo propósito se manifiesta por medio de dichas leyes, consideradas por nosotros como grandes e inevitables leyes naturales y también espirituales. Este efecto produce una mezcla de energías que al mismo tiempo equilibra e impele.

En diciembre de 1935 aumentaron las energías de Capricornio debido a la afluencia de fuerzas de una [i196] constelación aún mayor, que representa para nuestro zodíaco, lo que el zodíaco representa para la tierra. Otro acrecentamiento tendrá lugar en 1942. Debe recordarse que, desde cierto punto de vista, el círculo de los doce signos o constelaciones, constituye una unidad especial que gira dentro de nuestro universo de cielos, así como nuestro planeta gira en el centro de nuestro círculo de influencias. Por medio de este acrecentamiento -durante el ciclo zodiacal acuariano venidero- los grupos que existen en la tierra podrán disponer de una oleada de influencias capricornianas que afluirán a nuestro radio de captación cada siete años. El que acaba de pasar dio un gran impulso al trabajo del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo y fue la causa de que el mundo reaccionara muy bien a ese impulso particular. Se demostró en cada nación y grupo como una marcada tendencia hacia la buena voluntad. En 1942 tendremos otra afluencia planetaria de la cual se nos pide que dispongamos de ella y se nos exhorta a que hagamos la debida preparación. La “semana de impacto grupal” que acontece cada siete años, tendrá lugar desde el 21 hasta el 28 de diciembre y, si esto coincide con la Luna llena, la oportunidad será muy significativa. Debemos estar atentos a esta posibilidad. Esa semana debería ser considerada como preeminentemente la “semana del Festival” del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo y, después de 1942, debe aprovecharse este período y hacerse una preparación especial. Este hecho reclama la atención de todos nosotros.

Nuevos grupos aparecen en todas partes. Los grupos en el plano externo, con su diversidad de nombres y miras establecidas, no están conectados con este grupo interno que fomenta o “proyecta” los nuevos grupos, siempre que tengan una conexión definida, aunque ambigua. Esto siempre es posible cuando haya tres miembros del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo en cualquier grupo exotérico; entonces se vincula “por un [i197] triple hilo de luz dorada” al Nuevo Grupo de Servidores del Mundo que puede ser utilizado en cierta medida. Este grande y espiritual agrupamiento de servidores está superficialmente vinculado en el plano físico; en el plano astral el vínculo es más fuerte y se basa en el amor a la humanidad, y en el plano mental se establece un vínculo mayor desde el punto de vista de los tres mundos, como un todo. Por lo tanto, es evidente que en el individuo deben efectuarse ciertos desarrollos antes de que pueda llegar a ser, conscientemente, un miembro activo del Nuevo Grupo de Servidores del Mundo, grupo principal que, en la actualidad, trabaja definidamente bajo la Ley del Progreso Grupal.

1. El individuo tiene que haber despertado el centro cardíaco y exteriorizar su conducta en tal forma, que el corazón se vincule rápidamente con los centros cardíacos de por lo menos ocho personas. Entonces el centro cardíaco del Logos planetario podrá ocultamente absorber los grupos formados por nueve aspirantes conscientes. A través del centro cardiaco, Su vida afluirá y los miembros del grupo contribuirán con su cuota de energía a las influencias de la vida que circulan a través de Su cuerpo. La información que antecede es sólo de interés para quienes han despertado espiritualmente, y significará poco o nada para quienes aún duermen.

2. El centro coronario debe estar también en proceso de despertar, y la capacidad para “mantener la mente firme en la luz” debe estar algo desarrollada.

3. Tienen también que emprender alguna actividad creadora, y el servidor debe estar activo en algunos de los movimientos humanitarios, artísticos, literarios, filosóficos o científicos.

Todo esto implica la integración y el alineamiento de la personalidad y esa simpatía atractiva y magnética que de un modo u otro, caracteriza a los discípulos. Así, desde el [i198] punto de vista esotérico, existen en el individuo ciertos grandes triángulos de energía y, en consecuencia, en mayor grado en la humanidad. También las “fuerzas de la vida creadora” circularán desde el “punto dentro de la cabeza” (el centro coronario) a lo largo de la “línea que va al corazón” y, luego, con el centro laríngeo, formarán un “triángulo de luz ígnea”. Tal es el camino del progreso grupal y, cuando se va consumando, la Ley del Progreso Grupal comienza entonces definidamente a actuar y a controlar. Sería interesante enumerar los efectos conocidos de las cinco leyes que hemos estado considerando:

  LEY EFECTO EFECTO FÍSICO GENERAL REACCIÓN  CUALIDAD
 1  Sacrificio

Salvadores del Mundo. El Cristo. 

Unidad en el Plano Físico

Muerte deliberada. “Muero todos los días”

Amor al Salvador. Deseo de seguirlo. 

Las Masas

Desinterés

 2  Impulso. Magnético

Religión Mundial. Escuelas de Pensamiento. 

Unidad etérica o vital

Iglesias. Organizaciones. 

Amor a las ideas. Filosofía.

Los Aspirante

Devoción. Idealismo
 3  Servicio

Actividad Humanitaria.

Unidad Astral

La Cruz Roja y actividades afines

Amor a la Humanidad

Los Probacionistas

Simpatía. Compasión
 4 Repulsión

La Lucha contra el mal

Unidad Mental

Cruzadas de todo tipo

Amor al Bien

Los Discípulos

Discriminación
 5 Progreso Gupal

Nuevos Grupos

Unidad del Alma

Nuevo Grupo de Servidores del Mundo

Amor a la Sintesis

Los Iniciados

Inclusividad

 

6. LA LEY DE LA RESPUESTA EXPANSIVA

Ahora podemos dedicarnos brevemente a la sexta y séptima leyes y las trataremos en conjunto. Las otras cinco leyes actuaron definidamente en el plano físico. Los efectos o las consecuencias de los impulsos que están detrás de ellas, producen el desarrollo del [i199] propósito del Altísimo y pueden ser reconocidos en el plano fenoménico. Todos pueden serlo, pero la percepción consciente de la humanidad en la actualidad es tal, que sólo en cinco casos se ha podido observar el efecto que producen estas leyes, y únicamente por los aspirantes mundiales más avanzados, porque sólo los discípulos e iniciados pueden comenzar a percibir tenuemente los efectos de las leyes sexta y séptima, pero nadie más en la actualidad.

Estas dos leyes no son susceptibles de ser interpretadas como las anteriores, porque sólo quienes son iniciados o están preparándose para la iniciación, pueden empezar a comprenderlas. Es necesaria la iluminación, resultado de la iniciación, antes de poder llegar a la idea que está detrás de estas manifestaciones del propósito. Por lo tanto, no perderemos tiempo en tratar La Ley para expandir la Respuesta o La Ley de los Cuatro Inferiores, y sólo transcribiré dos antiguas estrofas que tendrán gran significado para el iniciado, pero para el lector y el estudiante comunes únicamente serán palabras resonantes y frases simbólicas sin sentido.

“El Sol, en toda su gloria, ha despuntado y ha lanzado sus rayos hacia el cielo de Oriente. La unión de los pares de opuestos produce, en los ciclos de tiempo y espacio, nubes y brumas. Ellas ocultan una grandiosa conflagración...

“Se produce el diluvio. El arca flota libremente. . . las llamas devoran. Los tres están libres; entonces nuevamente las brumas envuelven.

“Por sobre las nubes de la tierra brilla un signo... Sólo el ojo de la visión puede verlo. Sólo el corazón en paz puede escuchar el trueno de la Voz que surge desde las oscuras profundidades de la nube. Sólo la comprensión de la Ley que eleva y exalta puede enseñar al ‘ser humano del fuego y al hijo del agua’ a penetrar en la bruma. Desde allí asciende a la cima de la montaña y nuevamente se libera.

“La triple libertad obtenida nada tiene que ver con la tierra, el agua o el fuego. Es la liberación de triple naturaleza, que da la bienvenida al ser humano que pasa libremente de la esfera de la tierra al océano de la esfera acuosa y [i200] de allí al suelo ardiente del sacrificio. El sol acrecienta el fuego, disipa la bruma y seca la tierra, y así se realiza el trabajo”.

7. LA LEY DE LOS CUATRO INFERIORES.

“Partieron cuatro hijos de Dios. Pero sólo uno regresó. Cuatro Salvadores se fusionaron en dos, luego ambos se convirtieron en el Uno”.

Estas dos escrituras antiguas -una mística, la otra oculta- nada significan para muchas mentes, y esto puede ser comprobado fácilmente. Por lo tanto, de nada sirve considerarlas más minuciosamente. Aún no ha llegado el momento. Fueron dadas porque contienen un poder magnético que ayudará a estimular la comprensión.

Estamos hoy en vísperas de grandes acontecimientos. La humanidad sigue su camino con renovado impulso. Ya no está en la encrucijada, sino que ha hecho decisiones irrevocables y la raza se encamina por un sendero que la conducirá oportunamente a la luz y a la paz. Hallará su camino hacia “la paz que trasciende toda comprensión”, porque será una paz independiente de las condiciones externas, y no se basará en lo que la actual humanidad define como paz. La raza tendrá la paz de la serenidad y de la alegría, la serenidad basada en la comprensión espiritual, y la alegría que no es afectada por las circunstancias. Alegría y serenidad no son una condición astral sino una reacción del alma. Estas cualidades no son el resultado de la disciplina de la naturaleza emocional, sino la reacción natural y automática del alma y la recompensa por haber logrado un alineamiento definitivo. Estas dos cualidades del alma, serenidad y alegría, indican que el alma, el ego, el Uno, que permanece solo, controla o domina a la personalidad, las circunstancias y todas las condiciones ambientales de la vida en los tres mundos. [i201]