Los Rayos Cósmicos: Dones para la Era de Acuario

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Amaterasu, uno de los rayos cósmicos más potentes jamás detectados, hizo impacto en la atmósfera terrestre en 2021. Nombrado así en honor a la diosa del sol en la mitología japonesa, Amaterasu significa “que brilla en el cielo”, y es de allí de donde parece haber venido: su trayectoria puede remontarse hasta una vasta región de espacio vacío conocida como el Vacío Local. Los científicos están desconcertados por el hecho de que un rayo cósmico tan potente pudiera aparecer de repente de la nada. Y aun si este no fuera el caso, no hay ningún proceso conocido en el universo que pudiera haberlo producido, como exclamó un analista:

“Incluso la explosión de una estrella masiva (supernova) no tiene la suficiente energía para producir esto… ¿qué rayos está pasando?” ¹

Desde una perspectiva esotérica, una clave del misterio radica en la relación entre los rayos cósmicos conocidos por la ciencia y los siete rayos de la ciencia esotérica, los cuales son “la suma total de la Conciencia divina”, los “siete canales a través de los cuales fluye todo lo que existe en... [el]... sistema solar”.

En este ciclo actual, es el séptimo rayo de Orden Ceremonial el que está incrementando su poder, siendo su influencia más potente en el plano físico. Y a través de este canal, los rayos cósmicos conocidos por la ciencia moderna están encontrando su camino hacia la Tierra. En Psicología Esotérica Tomo I de Alice Bailey, leemos:

“Por la influencia del séptimo rayo entrante... se descubrirán nuevos rayos cósmicos. Ellos... han existido siempre en nuestro universo, pero utilizan la sustancia de la energía del rayo entrante como sendero para llegar a nuestro planeta y así revelarse.” ²

Los rayos cósmicos se originan en los reinos subjetivos del universo y, a medida que se precipitan en la atmósfera terrestre, producen ‘duchas atmosféricas’, cascadas de partículas cargadas y radiación electromagnética que, en el caso de Amaterasu, fueron captadas por detectores esparcidos por el desierto en Utah. Las duchas atmosféricas nos brindan maravillosos símbolos de la era de Acuario, un signo de aire con la nota-clave espiritual:

“Agua de vida soy, vertida para los hombres sedientos”.

Además, uno de los regentes planetarios de este signo, Urano, encarna la energía del séptimo Rayo de Orden Ceremonial entrante, permitiendo que nuevos rayos cósmicos como Amaterasu tengan un poderoso efecto en el comportamiento humano. Volviendo a la información sobre los rayos cósmicos en el libro Psicología Esotérica I:

“El interés demostrado hoy por los llamados rayos cósmicos, evidencia el reconocimiento científico de las nuevas energías entrantes de séptimo rayo.  Estos rayos que afluyen a través del centro sacro del cuerpo etérico planetario afectan lógicamente los centros sacros de la humanidad, de allí que la vida sexual del género humano está súper excitada momentáneamente, y a ello se debe además el excesivo énfasis puesto sobre el sexo y también (esto debe recordarse) el agudo impulso que ahora se expresa en forma mental, llevará al hombre en su oportunidad a pensar y solucionar cabalmente este problema del sexo.” ³

Si bien ha habido mucha investigación intelectual y debate sobre los problemas relacionados con el sexo, siguen surgiendo nuevos problemas, siendo un ejemplo notable la cuestión de la confusión y fluidez de género, especialmente en niños pequeños. Este fenómeno difícil y preocupante bien podría estar relacionado de alguna manera con las cualidades entrantes asociadas con el séptimo rayo de Orden Ceremonial, ya que éstas producen perturbaciones en el centro sacro colectivo de la humanidad. Y hablando en términos generales, parecen estar ocurriendo cambios en la forma en que muchas personas experimentan el género en las sociedades modernas. Sin embargo, lo preocupante es que, en nuestra sociedad mundial altamente sexualizada, los niños están rodeados de imágenes y contenido sexual en casi todas las áreas de la vida, lo que resulta en el deterioro de la inocencia infantil. Hoy en día, a los niños se les presentan muchos mensajes contradictorios sobre el género, ya que en los tiempos modernos su definición tiene mucho más que ver con las diferencias sociales y culturales entre los sexos que con las biológicas. Una definición notable se publica en el sitio web de la Organización Mundial de la Salud:

“El género se refiere a las características de las mujeres, los hombres, las niñas y los niños, todo lo cual es una construcción social.  Esto incluye las normas, los comportamientos y los roles asociados con ser mujer, hombre, niña o niño, así como las relaciones entre ellos. Como construcción social, el género varía de una sociedad a otra y puede cambiar con el tiempo... La identidad de género se refiere a la experiencia interna y profunda de una persona sobre el género, que puede o no corresponder a la fisiología de la persona o al sexo designado al nacer.” ⁴

Independientemente de nuestras propias opiniones al respecto, la respuesta a las identificaciones erróneas con el sexo físico del cuerpo radica en elevar la conciencia más allá de la naturaleza corporal. Dado que un sentimiento de incompletitud es una de las principales características de la disforia de género, fomentar el sentido estético en los niños pequeños seguramente sería de más ayuda que una educación sexual cada vez más temprana. El sentimiento por la belleza y el asombro en la naturaleza ayuda a nutrir en el niño un fuerte sentido de identidad con el alma de todas las cosas, incluyendo el alma de la humanidad en su conjunto, donde yace la solución al problema de género. A medida que la conciencia humana se eleva constantemente hacia el Reino de las Almas, las energías masculinas y femeninas se sintetizan en una unidad perfeccionada, como sin duda demostrará Cristo cuando reaparezca. Porque Cristo es el “ser humano perfecto”, quien une la más alta expresión de las fuerzas positivas y negativas de la creación dentro de Su propio Ser y las utiliza en servicio del Plan Divino. Este también es el glorioso destino que yace ante cada ser humano en algún momento del futuro, no importa cuán lejano pueda parecer.

Con esto en mente, parece evidente un progreso psicológico hacia esta unificación en muchos de los pensadores creativos de la raza que están adoptando más de las características espirituales superiores del sexo opuesto dentro de sí mismos. En lo concerniente a los cambios a largo plazo en el organismo humano, una profecía interesante y desafiante a considerar se encuentra en el libro Curación Esotérica:

“tLa exteriorización física densa de este centro [sacro] puede hallarse en las gónadas, los órganos humanos de la procreación, considerándolos como una unidad básica, aunque temporalmente separada en la actual expresión dualista del ser humano... Eventualmente, en el Divino Hermafrodita (que aparecerá más tarde) se tendrá otra combinación.” ⁵

Volviendo al libro Psicología Esotérica, aprendemos que:

“Otros rayos cósmicos actuarán sobre nuestra Tierra a medida que el séptimo rayo incremente su actividad; el resultado de su influencia facilitará la aparición de los nuevos tipos raciales.” ⁶

En otro lugar, se describen las siguientes características en conexión con este desarrollo evolutivo:

“La intuición estará despertando y será más pronunciada que ahora, pero la característica sobresaliente será la capacidad … de pensar en términos abstractos y utilizar la mente abstracta.” ⁷

Dado que el entrenamiento esotérico tiene el mismo objetivo de despertar la mente abstracta, quienes siguen la triple disciplina de meditación, estudio y servicio probablemente respondan a la influencia de los entrantes rayos cósmicos. Esto representa un estímulo adicional con el que se debe lidiar, lo que acelera el progreso, aunque también intensifica los desafíos psicológicos de hollar el sendero. Este es solo uno de los muchos nuevos factores a tener en cuenta en caso de experimentar un período de tensión psicológica no acostumbrada o fluctuaciones en la calidad de la conciencia subjetiva. Seguir un camino de entrenamiento esotérico en este momento trascendental de la historia planetaria es, sin duda, una prueba de tenacidad espiritual. Sin embargo, a quienes tienen la voluntad de perseverar en el gran esfuerzo, se les presenta una oportunidad sin precedentes para avanzar en el sendero del desenvolvimiento espiritual y aumentar su capacidad para servir.

El intervalo espiritual superior del año, marcado por los festivales de luna llena de Aries, Tauro y Géminis, es el momento más oportuno para hacerlo, trabajando con las nuevas influencias cósmicas que buscan entrar en la conciencia humana. La habilidad de “pensar en términos abstractos, y usar la mente abstracta” se ve facilitada por las ondas de energía u “ondas ofrendadas” que están circulando a través del reino de la mente planetaria en este momento. El puente de conciencia que se está formando entre la Jerarquía Espiritual y el reino humano se fortalece así, preparando el camino para la reaparición de Cristo, la gran esperanza para la humanidad en estos difíciles tiempos.

En la luz de la conciencia grupal,
Lucis Trust

1. Artículo de The Guardian
2. Psicología Esotérica, T. I, pp. 369–70 ed. ingl.
3. Ídem, p. 280
4. Organización Mundial de la Salud, Gender and health
5. Curación Esotérica, pp.179–80 ed. ingl.
6. Psicología Esotérica, T. I, p. 370 ed. ingl.
7. tratado sobre Fuego Cósmico, p. 456 ed. ingl.

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