Lisa Schirch es catedrática de Práctica de la Consolidación de la Paz y Tecnología en la Keough School of Global Affairs de la Universidad de Notre Dame. Con 30 años de experiencia en investigación sobre consolidación de la paz, promoción de políticas, práctica y docencia, su investigación actual se centra en las funciones positivas de la tecnología en la "tecnología de la paz" y la "consolidación de la paz digital".
En un artículo reciente escribí que el camino al infierno no está pavimentado con oro, sino con código. El código no es neutral. El diseño de las plataformas determina su impacto en la sociedad. Moldea nuestro comportamiento humano, nos muestra unos contenidos y no otros, y toma decisiones que llevan a la humanidad en una dirección u otra.
En mi investigación, hay tres narrativas sobre qué hacer con los contenidos nocivos en línea. La primera, la narrativa centrada en el usuario, la expresan las plataformas tecnológicas que afirman que sus plataformas son espejos neutrales que se limitan a reflejar los contenidos generados por los usuarios y a desarrollar algoritmos basados en el historial de búsquedas. Las empresas dicen que no pueden generar un contenido prosocial.
La segunda narrativa reclama la regulación del diseño tecnológico. Personas que solían trabajar en Facebook, Meta y Google forman parte de una nueva generación de personas que defienden la necesidad de regular el diseño de los espacios digitales para eliminar el foco sobre las pocas personas que luchan y promueven el odio en Internet.
La tercera narrativa es la Cohesión Social por Diseño, en la que las plataformas tecnológicas se diseñan para servir realmente a la humanidad y ser prosociales. Estas plataformas ya existen y podemos ampliar el apoyo público a las mismas. El Council on Technology and Social Cohesion (Consejo de Tecnología y Cohesión Social) que ayudé a crear reúne a personas de empresas tecnológicas, profesiones relacionadas con la consolidación de la paz, resolución de conflictos, mediación, gobiernos y empresas para estudiar cómo incentivar el apoyo a la tecnología prosocial.
En la actualidad, se están diseñando muchas plataformas tecnológicas para la deliberación destinadas a disminuir la polarización y producir cohesión social. Una de estas plataformas es Remesh, que ha sido utilizada por las Naciones Unidas para ayudar a los ciudadanos de Yemen, Túnez y Libia a hablar entre ellos y deliberar sobre las opciones políticas de su país: qué es posible y cómo podrían avanzar hacia el futuro. Remesh utiliza la inteligencia artificial para hacer digerible lo que dicen miles de personas, de modo que se pueda escuchar a gran escala a grandes grupos. Esto da a los individuos la sensación de que pueden participar en las decisiones que afectan a sus vidas, y también ayuda a los responsables políticos a decidir qué políticas son sostenibles y cuentan con el apoyo del público.
Otra plataforma, Polis, es utilizada por los gobiernos para reunir a grupos polarizados de personas y utilizar algoritmos de IA para encontrar el terreno común. Polis ayuda a la gente a ver no sólo lo que dice todo el mundo, sino en qué están todos de acuerdo. Descubrir dónde hay acuerdo es la clave de la consolidación de la paz y del éxito de los procesos de paz.
Vídeo en: https://bit.ly/3v2UB3q
